Los diputados catalanes deberán publicar sus reuniones con los lobbys
La medida entrará en vigor a finales de enero y no ha despertado demasiado entusiasmo entre los parlamentarios. “Mucho lío y postureo”, afirman
23 enero, 2017 00:00Los diputados del Parlamento catalán deberán hacer pública su agenda, es decir, desvelar sus contactos con grupos de interés --conocidos como lobbys--. La medida, que entrará en vigor a finales de mes, no ha despertado demasiado entusiasmo entre los miembros de la Cámara autonómica. Aplauden este ejercicio de transparencia, pero advierten de que algunas entidades reclaman privacidad para evitar represalias. Y muchas de ellas no quieren que se las asocie con partidos que no son afines.
Hace seis meses, el pleno del Parlamento catalán ratificó el Código de Conducta de los diputados, cuyo artículo 9 establece que los miembros de la Cámara catalana "deben hacer pública su agenda parlamentaria en el Portal de la Transparencia del Parlament". La publicidad de la agenda parlamentaria debe incluir, en todo caso, las "reuniones, los contactos y las audiencias que los diputados tienen, en el ejercicio de sus funciones, con cualquier persona, entidad u organización que tenga la condición de grupo de interés y pueda influir en la tramitación de las iniciativas parlamentarias o el ejercicio del derecho de voto".
Cada 15 días
Asimismo, esa agenda parlamentaria "debe estar actualizada y debe hacerse publicidad con periodicidad quincenal como mínimo. Se indicarán las personas, las entidades y las organizaciones concernidas, así como la fecha y el objeto de la reunión, el acto o la actividad".
En el mismo código se precisaba que esa obligación de publicitar las reuniones de los diputados entraría en vigor en el "momento en que se cumplan las condiciones técnicas del portal de la transparencia y de la web del Parlamento necesarias para que sean efectivas".
Poco entusiasmo
Ese momento ha llegado con la puesta en marcha de un registro de grupos de interés. Pero la medida no despierta demasiado entusiasmo entre los diputados, que tienen una sensación ambivalente. Por un lado, valoran positivamente que se dé un paso adelante en las políticas de regeneración democrática y transparencia. Pero, por otro lado, temen que determinadas entidades renuncien a reunirse con formaciones políticas que no son afines, pero a las que acudían para pedir ayuda.
"No creo que les haga mucha gracia que se sepa con quién se han reunido. Además, puede que sufran represalias", explica a Crónica Global un diputado. "Es un lío y hay mucho postureo en esa medida", afirma otro parlamentario.
Actualmente, los técnicos del Parlament están formando a los diputados y al personal de la Cámara catalana, para que conozcan el mecanismo para introducir sus datos en el portal de la transparencia. Éste fue estrenado en julio de 2015 para "dar cumplimiento a la Ley 19/2014 de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno", explican fuentes parlamentarias.