Manifestación para exigir el desacato a una sentencia que garantiza educación bilingüe a los hijos de una familia en un colegio público de Balaguer

Manifestación para exigir el desacato a una sentencia que garantiza educación bilingüe a los hijos de una familia en un colegio público de Balaguer

Política

La presión nacionalista hace renunciar a los padres de Balaguer a la educación bilingüe

La familia acosada no pedirá la ejecución de la sentencia del TSJC que ordenaba a un colegio público impartir una asignatura en castellano

11 septiembre, 2015 15:12

La familia de Balaguer (Lleida) acosada por reclamar una educación bilingüe para sus hijos ha decidido renunciar a la ejecución de la sentencia ante la intensidad y reiteración de las intimidaciones que han padecido en los últimos días.

Así lo han asegurado a Crónica Global los padres de los dos niños que el próximo lunes empiezan P5 y segundo de primaria en el Colegio Público Gaspar de Portolà, y a los que la justicia les había reconocido el derecho a recibir el 25% de las clases --es decir, una asignatura no lingüística, probablemente, matemáticas-- en castellano.

El padre denuncia "ensañamiento" contra ellos

El padre ha lamentado el “ensañamiento” que desde las redes sociales y desde algunos medios de comunicación ha recibido su familia desde que se filtró su identidad.

Y ha apuntado a la dirección del centro “por no preservar por encima de toda polémica nuestra intimidad, hiriendo gravemente nuestros derechos”, un daño que ha tildado de “irreparable”.

Solo querían mejorar el nivel de castellano

Los padres explican que todo empezó cuando detectaron que el nivel de castellano que se enseñaba en la escuela era muy bajo e instaron al jefe de estudios a mejorarlo “o cambiar el libro” que se utilizaba en la clase de lengua española “por alguno mejor”.

Como la respuesta fue evasiva y “poco respetuosa” se pusieron en contacto con un inspector de la Consejería de Enseñanza para buscar un centro con un mayor nivel de castellano o donde se impartiesen más horas. Pero tampoco hubo una respuesta satisfactoria.

La escuela rechazó "dialogar" con ellos

Entonces, a principios de este año, contactaron con la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) e iniciaron el proceso judicial que terminó con una sentencia del TSJC que ordenaba al colegio impartir una asignatura en castellano en las clases de los dos niños.

El padre asegura que “la escuela conocía los pasos que íbamos haciendo y en ningún caso hablaron con nosotros para dialogar sobre el tema”. Además, lamenta que hayan esperado hasta septiembre para comunicarles la sentencia al resto de familias, cuando la conocían desde hace tres meses.

"Que nadie vea vulnerados sus derechos"

En todo caso, el progenitor considera “no es justo que toda una clase tenga que vivir los resultados de una sentencia” y que “tal vez esa no era la solución”.

“Nosotros solo queríamos mejorar el nivel de la asignatura de castellano. Y tampoco se han contemplado desde el departamento de Enseñanza alternativas más equitativas para que nadie vea vulnerados sus derechos”, añade.

Maltratados por el independentismo radical

El padre asegura que se sienten maltratados por los sectores más radicales del independentismo y por algunos medios, a los que acusan de manipulación: “Yo soy catalán, mi familia es catalana, llevo toda la vida viviendo en Balaguer y no militamos en ningún partido político, ni ahora ni nunca”.

“No hay ninguna intencionalidad más allá de buscar el beneficio de mis hijos. ¿Por qué hemos de sufrir todo esto, si no hemos actuado de mala fe? Es un claro ensañamiento hacia nuestra familia, agravado por la situación política, social y económica actual”, insiste.

Exclusión social

“Lo que más me preocupa son mis hijos. ¿Cómo les haré entender que les dejen de invitar a los cumpleaños de sus amigos o les hagan el vacío en la escuela?", se pregunta.

Y concluye: "Queremos creer que los padres no condicionarán la moral de los niños, ni sus amistades, porque eso sería violar directamente su inocencia y su libertad. Seguro que los adultos sabemos diferenciar estos temas, pero los rumores que estamos oyendo no son nada buenos en este aspecto”.

Amenazas en las redes sociales

Cuando trascendió la sentencia, desde la AMPA del colegio se instó al resto de padres a no llevar a sus hijos a la escuela por considerar que la sentencia les deja “marginados” al obligarles a recibir seis de las 25 horas semanales en castellano.

El acoso y las amenazas en las redes sociales también fue total. “¡No quedará así! El día 14 [inicio del curso] ya se verá cómo se recibe a la familia", señaló la candidata de ERC en las pasadas municipales Roser Jurado Regué.

Boicot al negocio familiar

De forma paralela, la familia sufrió un boicot contra el pequeño negocio que regentan en la población leridana.

Muchos de sus clientes habituales desaparecieron de la noche a la mañana. Otros conocidos les retiraron la palabra.

CDC, Unió, ERC, la CUP y el PSC, contra los padres

La guinda final la puso la manifestación convocada por la AMPA --con el aval de CDC, Unió, ERC, la CUP y el PSC-- el lunes pasado a las puertas del colegio.

Cerca de medio millar de personas --portando esteladas y pancartas en defensa de la inmersión lingüística escolar obligatoria exclusivamente en catalán-- se concentraron para exigir el desacato a la sentencia del TSJC.

Sin embargo, no hará falta desobedecer la sentencia. Los padres --que no han recibido el amparo de ninguna institución pública, ni local, ni autonómica, ni nacional-- han acabado cediendo a la presión del nacionalismo.