“Estimada Mariàngela. Qué alegría tener noticias tuyas de nuevo. No daba crédito a lo que se decía de ti, que rechazas el castellano en TV3 y que diste un toque de atención a los responsables de la nostra. ¡Admirable! Pero tu intervención en el Pleno celebrado ayer en el Parlament fue muy clarificadora. No solo te sobra el español en la cadena pública, sino también en la Cámara autonómica, que representa a todos los catalanes.

Inevitable recordar que, hace muchos años, el expresidente del PP catalán, Alberto Fernández, era abucheado por utilizar el castellano. ¡Qué bizarros eran entonces nuestros diputados! Después se fue normalizando el uso de ese idioma y nadie volvió a cuestionarlo. ¡Excepto tú, estimada Mariàngela, que has vuelto a poner orden! También en TV3. Porque, ¡qué demonios!, si el Govern tiene que dar un serio correctivo a la televisión pública, a riesgo de que suponga una injerencia, pues se da. No hagas caso de la desautorización de Meritxell Budó.

A la consejera portavoz le gusta llevar la contraria y lo mismo critica al presidente Quim Torra por plantear un nuevo referéndum que apoya el nuevo proyecto rupturista de Carles Puigdemont. Aunque ahora se desmarque de tu apuesta monolingüe y de tu regañina a la nostra, Budó es de las tuyas. Cuando era alcaldesa de La Garriga (Barcelona), abroncó al concejal de Ciudadanos por utilizar el español en su saludo al colectivo andaluz durante un Pleno. “Es triste y preocupante”, dijo.

Eso ocurrió un 28 de febrero, Día de Andalucía. ¿No crees también, estimada Mariàngela, que hay demasiados andaluces en Cataluña? La actriz Monserrat Carulla, fichada por Junts pel Sí, dijo en una ocasión que eso era consecuencia del empeño de Franco en "llenar trenes de gente” para diluir la identidad catalana. ¿Qué opinas, Mariàngela?

Te entiendo, estimada. La transversalidad la carga el diablo. Ensanchar la base antes de unas elecciones es una cosa, pero otra es dar pábulo a quienes defienden que la lengua no puede ser nunca elemento de confrontación o que el multilingüismo es riqueza. Quiero pensar, por tanto, que el proyecto de Puigdemont es transversal, sí, pero focalizado solo en el espectro independentista. A ver si vamos a desnaturalizar también las esencias separatistas.

Como consejera de Cultura, Mariàngela, tienes mucho que decir. Pero sabemos que el expresidente es muy astuto. Como lo era Artur Mas. Y crear ahora un partido, que no es un partido, sino otra cosa, una opción como dice nuestra admirada Pilar Rahola, ¡es una jugada maestra!

No te entretengo más, estimada. Recuerdos a tus compañeros del Grupo Koiné. Transmíteles mis deseos de que no desfallezcan en su cruzada monolingüe.

PD: Te pido disculpas, como ayer hizo la Consejería de Educación --¡a ver si ERC nos toma la delantera!-- por haber escrito esta carta en castellano. Una excentricidad por mi parte. Presupongo que siendo catedrática de Filología latina, entiendes este idioma y que tu rechazo solo forma parte de tu activismo político".