Cerdanyola elimina el 'macrocentro' comercial de la nueva ordenación del Sincrotrón
El municipio podrá ampliar la zona industrial del llamado Centro Direccional, construir 5.377 viviendas y reserva 110 hectáreas para uso terciario
5 agosto, 2019 00:00El cambio de Gobierno en Cerdanyola del Vallès (Barcelona), con el socialista Carlos Cordón en sustitución de Carles Escolà (CUP), ha implicado desatascar la macroregulación urbanística que se arrastra desde 2009 en el municipio. Esta semana se ha dado luz verde al nuevo planeamiento para edificar todos los terrenos que están alrededor de la zona del Sincrotrón Alba, el Centro Direccional, el gran crecimiento que está pendiente de ejecutar en la ciudad pero que ahora no contarán con ningún centro comercial gigante.
Se trata del cambio más sustancial entre el Plan Director Urbanístico (PDU) actual y el que se aprobó hace cuatro años, el segundo tramitado y que también acabó anulado en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). En esa regulación se incluía una pastilla de terreno de 300 hectáreas que abría la puerta a que la ciudad albergase el principal centro comercial de Europa. Despertó el interés de varios operadores y propició que la multinacional Unibail Rodamco se sumara a la pugna judicial para intentar sacar adelante el proyecto.
110 hectáreas de uso comercial
Finalmente, la pastilla de terreno que se ha destinado a uso comercial se ha limitado a 110 hectáreas situadas junto a la estación de Adif que hay en la zona. Podría albergar un establecimiento comercial, pero no con el perfil que se había diseñado con anterioridad al estimarse en parte las alegaciones de la Asociación Cerdanyola Vía Verda. Se han reservado 178 hectáreas para mantener el corredor natural metropolitano que llega hasta Collserola.
Hay mucho más espacio reservado para el desarrollo de zonas de actividad económica en el nuevo planeamiento urbanístico. Básicamente, para edificar naves industriales y logísticas, una demanda destacada de la zona de influencia de Barcelona por la falta de activos libres. Cabe tener en cuenta que el Sincrotrón está situado a poco más de 20 kilómetros del centro de la capital catalana.
Mejoras en infraestructuras
En cuanto a los accesos viarios y en transporte público, el proyecto que ha superado el primer trámite incluye mejoras pactadas tanto con el Ministerio de Fomento como con la Generalitat. Se han diseñado nuevas vías longitudinales y transversales, tal y como informa la consejería de Territorio y Sostenibilidad. Se da un paso adelante en los accesos por la B30 y la C50, las vías que unen el municipio y Barcelona por el sur como por el este de la ciudad.
También se han planificado “nuevas conexiones de transporte público”, tal y como remarca el departamento. La más importante será la construcción de un nuevo tramo de Ferrocarriles de la Generalitat (FGC) que tendría conexión con la línea del Vallès, que discurre por ciudades de los alrededores como Sant Cugat del Vallès o Sabadell, y más autobuses. Esta última opción sería la primera que se desarrollaría, ya que implica movilizar menos presupuestos que la construcción de un nuevo tren en Cataluña. De hecho, sería una propuesta en la cola de las que están pendientes de ejecutar como la finalización de la L9 o la unión de las líneas del Baix Llobregat y del Vallès por plaza Francesc Macià.
Vivienda de obra nueva
La urbanización de la zona del Sincrotrón permitiría también a Cerdanyola sumar un barrio de nueva construcción. Y en esta ocasión, más grande de lo que se había propuesto hace cuatro años.
Se proyectan un total de 5.377 viviendas frente a las 4.850 planificadas en marzo de 2014. De todas ellas, 2.843 serán de uso libre y las 2.534 restantes de protección oficial. Estas cifras también han despertado el interés de las promotoras, que esperan que el PDU que se ha empezado a tramitar llegue finalmente a buen puerto.
Exposición pública
Con todo, el proceso aún está en fase inicial. La Generalitat ha dado el visto bueno al primer borrador del plan y ha abierto un periodo de exposición pública en el que los interesados pueden presentar las enmiendas que consideren oportunas a lo largo de 45 días. Una vez finalizado este plazo, se proseguirá con su estudio y la incorporación de las que consideren oportunas.
Aún deben pasar años para que se inicien las obras de transformación del territorio, pero el proyecto se ha puesto de nuevo en marcha. Por ahora, sin ninguna denuncia judicial que haga temer que decaiga otra vez.