La desconocida iglesia romántica perdida en un camino rural, Santa Maria d'Avià WIKIPEDIA
No lo sabías, la desconocida iglesia romántica perdida en un camino rural: fue usada como almacén agrícola
Se trata de una construcción del siglo XII que se encuentra prácticamente inalterada desde su origen
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Cuando uno pasea por las montañas de Cataluña es normal encontrarse algunas casas destruidas e iglesias. Algunas están abandonadas y otras en perfecto estado. No tienen la fama de la Sagrada Familia o catedral de alguna ciudad catalana, pero algunas son de una belleza que pocos conocen.
Una de estas ermitas es de Santa Maria d’Avià, situada, precisamente, en el Pla de Santa Maria, lejos de las rutas turísticas más frecuentadas. De hecho, se encuentra en una zona rodeada de campos cultivados y masías diseminadas.
Se trata de una construcción románica del siglo XII y, desde entonces, se encuentra prácticamente inalterada desde su origen. No tiene la monumentalidad de los grandes templos del románico catalán, como Boí o Taüll, tal vez por sus dimensiones.
La silueta sencilla de su ábside y la espadaña remata su tejado de una sola vertiente, pero lo mejor es la historia que esconde.
Un poco de historia
Santa Maria aparece documentada por primera vez el 14 de diciembre del año 983. En aquel momento, el conde Oliba Cabreta la donó al monasterio de Sant Llorenç prop Bagà. En sus orígenes, tenía funciones parroquiales y articulaba la vida espiritual de la pequeña comunidad agrícola del entorno.
Fue así hasta durante más de tres siglos. En 1312, fue sustituida por la nueva iglesia de Sant Martí, situada en el núcleo urbano actual de Avià y allí empezó su decadencia. Aun así, Santa Maria conservó su condición de espacio litúrgico y continuó siendo punto de reunión y devoción.
Cómo es la iglesia
Más allá de su historia, la iglesia destaca también por su arquitectura románica. De nave única, la ermita está cubierta con una bóveda de cañón reforzada por dos arcos torales que descansan sobre pilastras adosadas. Esta estructura, característica del románico catalán, se prolonga en un ábside semicircular con ventana axial de doble derrame.
El ábside está decorado exteriormente por un friso de arquillos ciegos entre lesenas, uno de los pocos elementos ornamentales de un edificio que destaca más por su sobriedad que por la riqueza escultórica.
Interior de la iglesia de Santa María d'Avià BERGUEDÀ TURISMEE
La fachada occidental, donde se encuentra la puerta de acceso, presenta una doble arquivolta de medio punto compuesta por dovelas lisas. El campanario, en forma de espadaña de dos ojos, se eleva sin elementos decorativos sobre la pared del hastial.
El aparejo utilizado en su construcción está compuesto por sillares de piedra caliza de tamaño irregular, dispuestos en hiladas horizontales poco uniformes. La cubierta, de teja árabe, se adapta a una planta rectangular de proporciones muy equilibradas.
Un frontal de museo
El interior carece de decoración mural visible, aunque en los años 60 se documentaron restos de pintura románica desaparecidos con el paso del tiempo. Sin embargo, lo más destacado del conjunto se encontraba en el altar.
Por último, destacar que la iglesia contaba en el frontal de altar de Santa Maria d’Avià una pieza de madera policromada del siglo XIII, atribuida a un maestro anónimo de influencia bizantina. Representa a la Virgen en posición frontal, sedente, con el Niño en el regazo, flanqueada por escenas de la infancia de Cristo: la Anunciación, la Visitación, el Nacimiento y la Adoración de los Reyes.
El golpe de la Guerra Civil
Esta pieza fue trasladada al Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) por motivos de conservación, y actualmente puede contemplarse allí. En su lugar, la iglesia alberga una réplica fiel del frontal original.
En cualquier caso, la iglesia sigue brillando. Recuperada del abandono en el que cayó durante la Guerra Civil. El templo se fue degradando y sufrió daños tras ser utilizada como almacén agrícola.
Frontal del altar de Santa Maria d'Avià MNAC
Recuperación del templo
Todo hasta 1970. Fue entonces cuando la Diputación de Barcelona impulsó su restauración integral, dirigida por el arquitecto Francesc Fàbregas. Las obras se llevaron a cabo durante tres años, y permitieron recuperar la estructura original, consolidar los muros y reponer los elementos más deteriorados.
El templo fue reconsagrado el 14 de mayo de 1973 y desde entonces se conserva como iglesia rural de uso ocasional. Eso no impide que el acceso al edificio esté restringido y para visitarlo sea necesario solicitar la llave en la masía vecina conocida como Casa Santamaria.
Cómo llegar
Desde Barcelona, se tarda una hora en llegar, yendo por autopista C-16 hasta la salida para ir por la carretera BV-4135 hasta llegar al núcleo de Avià. Desde allí, un desvío señalizado conduce en pocos minutos por caminos rurales asfaltados hasta la iglesia, situada a poco más de un kilómetro del centro del municipio.
Desde Girona, se puede tomar la C-25 (Eix Transversal) hasta la salida 178 hacia Olost/Prats de Lluçanès. Desde allí, se continúa por las carreteras comarcales BV-4401 y C-26 hasta llegar a Berga, donde se enlaza con la C-16 sur en dirección a Avià. En este caso se tarda una hora y tres cuartos.
