Patio del Palau Solterra

Patio del Palau Solterra

Historia

Este es el nuevo Bien de Interés Cultural Nacional de Cataluña: un palacio del siglo XIV a hora y media de Barcelona

Publicada

Noticias relacionadas

Cataluña es un territorio rico. No sólo a nivel económico. Su historia y su cultura ha dado a genios como Dalí, Pau Casals, Gaudí… todos ellos han hecho obras de fama internacional y que forman parte del patrimonio cultural español. 

Desde los restos de la muralla romana de Barcelona hasta los castillos medievales del interior, cada construcción cuenta una historia única. Dentro de este extraordinario patrimonio, algunos edificios han recibido la distinción de Bien Cultural de Interés Nacional.

Un bien de la clase alta

Ejemplos de ello son la Basílica de Santa María del Mar, el Monasterio de Poblet o el Castillo de Cardona, que se alzan como testigos de la evolución cultural catalana. La lista es interminable y, desde hace poco tiempo, es aún más larga. Desde hace unos meses, a este listado se ha sumado un palacio que tiene una íntima conexión con la burguesía catalana.

Estos miembros de la clase alta de siempre se han podido permitir construir casas nobles, viviendas modernistas, castillos e incluso palacios. Y es precisamente uno de estos el que pasa a engrosar la lista de bienes culturales. Se trata del Palau Solterra, una impresionante construcción del siglo XIV situada en Torroella de Montgrí, en el Baix Empordà.

Así es el Palau Solterra

Este palacio centenario ya hace tiempo que es reconocido en el territorio. De hecho, es una joya arquitectónica que combina estilos gótico, renacentista y barroco, fruto de las sucesivas reformas que ha experimentado a lo largo de los siglos. Ahora, por fin ha sido reconocido como muchos creen que merece.

El título de Bien Cultural de Interés Nacional es un reconocimiento otorgado por la Generalitat que no sólo distingue destacar aquellos edificios o monumentos históricos y de gran valor arquitectónico. Esta categoría supone la protección del edificio por el valor excepcional que representa. 

De cuándo es

Originalmente construido en el siglo XIV, este palacio fue ampliado y adaptado durante generaciones, integrando influencias artísticas de diferentes épocas. Entre las transformaciones más destacadas figura la aportación del arquitecto novecentista Rafael Masó, quien remodeló la terraza del primer piso para crear un jardín elevado con una fuente central, bancos y jardineras, dotando al espacio de una estética única.

El palacio impresiona no solo por su fachada y su interior, su patio renacentista es todo un espacio solemne y de gran belleza que en el pasado funcionaba como entrada para las cocheras de una belleza fuera de lo común. Este rincón del palacio conserva elementos originales como un pozo, una escalera que lleva a la planta noble y ventanales imponentes. 

Qué ver

El interior del palacio refleja una integración magistral de estilos arquitectónicos. En la planta baja, destaca un patio renacentista de gran solemnidad, con un pozo central, una majestuosa escalera de piedra y accesos a las antiguas cocheras. En la planta noble, encontramos puertas góticas flamígeras con capiteles historiados y elementos decorativos que datan de diferentes épocas, incluidos escudos nobiliarios y paneles de madera tallada. Además, el comedor principal, con un hogar de fuego de piedra del Montgrí, conserva arrimadores de cerámica de estilo hispano-morisco y techos artesonados con florones dorados.

Entrada del Palau Solterra

Entrada del Palau Solterra FUNDACIÓ VILA CASAS

Según la Generalitat, este palacio es particularmente valioso debido a la escasez de obras de estilo renacentista en el territorio. Algo que se aprecia cuando uno se adentra en las profundidades del edificio. La planta noble revela un espacio rico en detalles arquitectónicos. Los techos de madera y las puertas góticas de la época conviven en armonía con elementos barrocos integrados en épocas posteriores a su construcción original, creando un diálogo único entre épocas. 

A esto cabe añadirle, la historia que guarda en su interior. La segunda planta del palacio incluye dependencias del servicio, buhardillas y una sala especial donde aún se conserva una poesía escrita por Francesc Mirabent en honor a la marquesa del palacio.  

Nueva vida

Todo ello ahora es visitable. Y no solo eso, se ha abierto al público y a otros amantes de la cultura. Desde el año 2000, el Palau Solterra alberga el Museo de Fotografía Contemporánea, una sede de la Fundació Vila Casas. 

Esta entidad ha transformado el antiguo palacio, concebido como vivienda, en un puente entre lo publico y lo privado, el pasado y el presente. En su interior se alberga ahora una colección de más de 200 fotografías contemporáneas de artistas internacionales como Xavier Miserachs, Ouka Lele, Frank Horvat o Toni Catany. 

Cuándo ir

El museo no solo celebra la riqueza del arte contemporáneo, sino que también preserva y realza los elementos históricos del edificio, creando una experiencia única donde convergen la historia y la modernidad. No es de extrañar que desde 1981 fuese declarado monumento histórico artístico y, en pleno siglo XXI, Bien Cultural de Interés Nacional.

Quien quiera visitarlo debe saber que únicamente abre los fines de semana y los domingos solo de las 11 a 14h. El sábado su horario sí es de mañana y tarde, abriendo a las 11 y cerrando a las 13.30h., para volver a acoger a visitantes desde las 16.30 a las 20.30h.

Cómo llegar

Para llegar al Palau Solterra en coche desde Barcelona es recomendable ir por la AP-7 en dirección a Girona y tomar la salida 6 hacia Girona Norte/Flaçà/Palamós, para luego continuar por la carretera C-66 en dirección a La Bisbal d’Empordà. Una vez allí, se debe seguir las indicaciones hacia Torroella de Montgrí. 

Otra opción es ir por la C-32 en dirección a Blanes y continuar hacia Girona enlazando con la C-35 hasta conectar con la AP-7. Desde esta autopista, se sigue el mismo recorrido mencionado anteriormente. Más o menos se tarda lo mismo, una hora y media.