Marc Castells
Es innegable que, desde que en 2011 se hizo con la alcaldía de Igualada, Marc Castells ha logrado reducir la deuda per cápita del municipio en más de 500 euros. Sin embargo, la cifra aún es la más elevada de entre todos los municipios catalanes: 955 euros contantes y sonantes por habitante. Son datos que deberían despertar las alarmas en la capital de L'Anoia.
Tampoco se puede culpar por completo a la envenenada herencia que recibió, pues ese agujero ya ha vencido y está amortizado. Castells deberá reducir el gasto del consistorio para sanear las cuentas del municipio, o enfrentarse a una nueva subida de impuestos, pese a que la última que hizo derivó en rebelión vecinal.
Castells se mueve como pez en el agua en Cataluña: tiene contactos en todos lados y gran influencia en la Diputación, donde ostenta el cargo de vicepresidente cuarto. Gracias a ello, puede atraer inversiones y lograr más ayudas y subvenciones europeas y estatales. Sólo si sigue ese camino y modera el gasto, Igualada podrá dejar de encabezar la clasificación de la deuda per cápita.