Josep Oliu
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Cuando Josep Oliu habla, conviene aplicar el oído. El presidente de Banco Sabadell formuló ayer sus previsiones económicas para España en el auditorio de la Cámara de Comercio de Sabadell, que se llenó para seguir al banquero.
Oliu defendió la solidez del sistema financiero español, que ha salido sin rasguños de la crisis del Covid --como prueban los buenos números de la entidad dirigida por César González-Bueno-- y diagnosticó la buena salud de la economía de particulares y empresas en el país.
Por el contrario, criticó el desequilibrio de las finanzas públicas y exigió que se cuadren los presupuestos tras la barra libre de la pandemia. Toca ortodoxia fiscal, resumió. El presidente del Sabadell también puso sobre la mesa la espinosa cuestión de la productividad, la gran asignatura pendiente del tejido productivo.
Pese a estos desafíos, Oliu está convencido de que la economía española afronta con garantías un ejercicio en el que puede batir de nuevo las previsiones de crecimiento de los organismos internacionales. Así ocurrió en 2023, argumentó.