Santacreu se moja por Grífols
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La crisis de Grífols ha conmocionado el microcosmos empresarial barcelonés. El ataque de Gotham contra la multinacional de hemoderivados ha alcanzado a uno de los nuestros, entendiendo nuestros no solo como una de las primeras compañías catalanas sino también como una de las sagas empresariales, los Grifols, de mayor pedigrí en la comunidad.
Por eso no es de extrañar que Josep Santacreu, presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, haya salido en defensa del laboratorio. "Hemos estado desde el primer momento con Grífols. Es uno de nuestros referentes en la industria farmacéutica y estamos preocupados por el efecto de algunas prácticas que consideramos inadecuadas de los fondos bajistas", ha asegurado hoy el dirigente cameral en un encuentro informativo.
Pese a su estilo mesurado, Santacreu ha soltado varias cargas de profundidad. "Se deben evitar las prácticas alejadas de la ética empresarial", ha dicho, además de criticar las "actuaciones de la economía financiera cuando se trata de lucrarse". A su juicio, Gotham presenta "comportamientos especulativos que aunque son legales son poco éticos".
El presidente de la Cambra ha pedido la máxima agilidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, que estudia el caso, para dilucidar las responsabilidades del fondo bajista. En ocasiones se ha criticado a Santacreu (con razón) por su falta de arrojo. Con Grífols no podrá decirse lo mismo.