Albert Rivera da voz a ‘líderes’ (en masculino)
La trayectoria política de Albert Rivera se resumiría en un fugaz ascenso en el mapa catalán y estatal y una sonora caída de la que las siglas que representaba, Ciudadanos, no se ha recuperado. Meses después de salir del Congreso de los Diputados por la puerta de atrás, el que otrora había sido la gran esperanza liberal en el país se lanza de nuevo a la palestra pública en la dirección de un curioso seminario sobre liderazgo y comunicación denominado Líderes en el Cambio.
Es curioso porque, de entrada, para Rivera liderazgo solo se entiende en masculino. No cuenta por el momento con ninguna mujer entre las voces que deberán explicar de qué va esto de estar al frente de un equipo que pretende modificar cosas. Él mismo ha señalado que habrá más nombres en la sesión y que los divulgará en los próximos días, así que, con una visión extremadamente positiva, se puede pensar que ha tenido un traspiés al hacer público el primer cartel.
Lo que es menos justificable son los líderes que ha elegido para rodearse. Además de él mismo, cuya experiencia no es precisamente exitosa por su desenlace, el resto de ponentes muestran un pasado como mínimo controvertido y que cuesta de encajar en el título del seminario.
Dimas Gimeno nunca pudo concluir (casi ni poner en marcha) sus planes en El Corte Inglés porque fue desplazado por sus primas en una batalla familiar por el control del grupo que aún está viva, aunque tenga ahora un tono muy bajo. Asegurar que es un “referente” en el sector del retail es algo arriesgado, ya que su nueva aventura empresarial empezó a andar este octubre.
La salida de Alberto Ruíz Gallardón del primer Gobierno de Mariano Rajoy fue casi tan polémica como el varapalo en las urnas de Rivera. Como ministro de Justicia había apostado todo su crédito político en una reforma de la ley del aborto retrógrada en el país que no contó con el apoyo del presidente. Renunció al cargo el 23 de septiembre de 2014 y tres años después se refugió en el despacho de abogados que había fundado su padre. También está de forma permanente en el Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid.
En cuanto al político venezolano Leopoldo López, sí que ejerce de líder opositor en su país con todo lo que eso implica. Se debe ser muy valiente para ejercer este cargo y así lo demuestra que permaneciera bajo arresto domiciliario y se viera obligado a refugiarse en la embajada de España en Caracas. Con todo, le ha superado Juan Guaidó.
Aunque si se habla de liderazgo, el de Luis Figo si que levanta polvareda. Que cambiase la camiseta del Barça por la del Madrid en el 2000 aún no se ha perdonado. Es el jugador que tiene el récord de haber recibido en el campo el regalo más bizarro de los seguidores azulgranas, una cabeza de cerdo que le fue arrojada mientras sacaba un córner vestido de blanco. De todo el elenco de Rivera, Figo sí es un líder del cambio. Otra cosa es que este sea en positivo.