¡Menudo mazazo para Colomines!
Por sus artículos sabemos que Agustí Colomines, uno de los gurús del independentismo irredento, se ha distanciado de Carles Puigdemont, a quien se arrimó durante una azarosa catarsis convergente que ha derivado en el cisma entre Junts per Catalunya y PDECat.
Se desconocen los motivos íntimos que han llevado al historiador a cuestionar incluso el Consejo para la República, pero fuentes palaciegas aseguran que detrás de ese malestar está la negativa del Govern a reincorporarle como director de la Escola d'Administració Pública de Catalunya, cargo del que fue destituido en 2018 en aplicación del artículo 155 de la Constitución y que ocupó con un notorio sesgo soberanista. Que Colomines fuera director también de la Fundación CatDem, implicada en los casos de corrupción de CDC, también suponía un hándicap.
El mazazo definitivo ha tenido lugar hoy, con la designación de Marta Felip como directora de ese centro, destinada a formar a los altos funcionarios de la Generalitat. Felip era secretaria general de la consejera de Empresa, Àngels Chacón, víctima de las purgas de Puigdemont en la Generalitat. El Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC) publica hoy el nombramiento.