Cordón se enfrenta a sus primeros problemas en el seno de Grupo Zeta
Los trabajadores de Grupo Zeta no han dejado que su nuevo consejero delegado, procedente de la dirección general de Fira de Barcelona, aterrice en el cargo para hacerle llegar toda una serie de peticiones y de advertencias sobre la situación laboral del grupo.
A Agustí Cordón, que todavía compatibiliza su nuevo cargo con sus antiguas obligaciones feriales, se le ha dirigido la coordinadora de comités de empresa de Grupo Zeta para alertarle del “repunte” de la conflictividad laboral en la compañía de comunicación, así como solicitarle una reunión en la que el nuevo primer ejecutivo aclare el impago de prejubilaciones en Dispesa, la segregación prevista en El Periódico de Cataluña y el recorte “salvaje” de pluses en el diario Sport.
Cordón, que todavía no ha aterrizado en la compañía que va a dirigir en breve, deberá dar respuesta a varias peticiones de la plantilla. En el caso del buque insignia del holding de Antonio Asensio, el diario editado en Barcelona, deberá responder sobre qué garantías ofrecerá la empresa del cumplimiento de sus pactos con la plantilla. El comité de empresa aspira a que esas garantías sean las mismas, al menos, que las que Grupo Zeta ha dado a la banca que ha reformado de nuevo la financiación del grupo.