Los grandes desembolsos de la junta directiva de Josep Maria Bartomeu dejaron al FC Barcelona al borde del precipicio. La pandemia del coronavirus asestó la estocada final, pero poco habían ayudado en términos económicos los fichajes de Antoine Griezmann, Philippe Coutinho y Ousmane Dembelé. El atacante brasileño parecía que no tendría competidor en la cima de las incorporaciones más caras de la historia de la entidad. Sin embargo, parece ser que la vigente dirigencia del club ha heredado los últimos vestigios de la contratación del mosquito.
Según desvela el diario Bild, el Barça ha abonado todos los pagos variables estipulados en el traspaso de Dembouz. La operación ascendería a 148 millones, por lo que se acerca a los 160 millones entre fijo y bonus que costó Coutinho. De entrada, el montante pactado con el Borussia Dortmund en verano de 2017 se situaba en los 105 millones. En aquel entonces ya trascendió un importe variable de 40 kilos.
Entre los más caros
Aun así, el extremo francés todavía no entraría en el podio de los fichajes más caros de la historia. La burbuja futbolística alcanzó la cúspide en verano de 2017. El PSG bajo el paraguas de Qatar Sports Investments (QSI) batió un récord todavía intacto mediante el pago de la cláusula de rescisión de Neymar Jr: 222 millones de euros. En aquella misma ventana de traspasos, el conjunto parisino también selló la llegada de Kylian Mbappé para formar una delantera de ensueño. El astro francés aterrizó en el Parque de los Príncipes con una cláusula de compra de 180 millones. Coutinho cierra el podio con 155 millones gastados.
El Barça, con liquidez procedente de la venta de Ney, tiró la casa por la ventana para sustituir la traumática marcha del atacante brasileño. De ahí el fichaje de Dembelé, liquidado siete años más tarde. Amén de los 105 millones pactados en un principio con el Dortmund, la entidad barcelonista pagó 10 kilos por clasificarse dos veces a la máxima competición continental, y 10M por partidos jugados. Se desconoce el dinero restante. Luis Enrique se lo llevó rumbo a París en 2023 por 50 millones, de los que el jugador y su agente se repartieron 24,6M. El club catalán solo ingresó 25,4M.
Coutinho, la otra ruina
Para ver a Coutinho vestido de azulgraba hubo que esperar hasta enero de 2018, cuando el Liverpool dio su brazo a torcer. La inversión por el crack de la canarinha se acordó en 120 millones fijos y 40 variables: 5M por alcanzar los 25 partidos con la camiseta blaugrana, 10M por clasificar a la Champions League en los dos primeros años, 20M por rebasar los 100 encuentros y 5M más por alzar una orejona.
El que fuera 10 red se marchó del Camp Nou definitivamente en 2022 con más pena que gloria y 106 partidos en sus botas. El tercer traspaso más caro de la historia tuvo un peso intrascendente la mayor parte del tiempo en can Barça.
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