Cara y cruz: las malas noticias empañan una victoria de récord del Barça en Vallecas

El FC Barcelona ha perdido mucho más de lo que ha ganado en Vallecas (1-2). Dani Olmo ha tocado el cielo con gol en su debut. Después de 6 años, Hansi Flick ha roto el maleficio del estadio del Rayo Vallecano, donde el Barça no vencía desde la jornada 11 de la Liga 2018-19.  El técnico alemán ha igualado otro récord sintomático de la dinámica positiva: tres victorias en las tres primeras jornadas de competición doméstica. Un registro que estableció Ernesto Valverde por última vez en 2018. Sin embargo, el míster del cuadro azulgrana no se ha marchado nada satisfecho de un triunfo que ha calificado como "triste".

La posible grave lesión de Marc Bernal ha empañado una noche que debía terminar en un final feliz para los culés. El mediocentro se ha marchado con muletas del estadio, seguido por el presidente Joan Laporta, con cara de abatimiento. "Al final es una victoria triste, porque Marc Bernal está lesionado y no pinta bien. Tenemos que esperar mañana a las pruebas. Nadie está contento en el vestuario", ha lamentado Flick en declaraciones para DAZN.

El debut de Olmo

Dani Olmo debía copar titulares y portadas en Barcelona tras una exhibición individual de 45 minutos. Giros y controles asombrosos, una visión de juego privilegiada y golazo de fichaje estrella. Desde su entrada al campo en la reanudación como relevo de de Ferran Torres, el atacante de Terrassa le ha cambiado la cara al equipo azulgrana. Hasta el descanso, los delanteros del Barça ni siquiera habían inquietado al portero Dani Cárdenas. 60 segundos se ha demorado la nueva incorporación en provocar un penalti catedralicio de Florian Lejeune, que el colegiado y el VAR han omitido.

Minutos más tarde, una croqueta sobre un rival para salir al contraataque y un derechazo lejano que se ha estrellado contra el larguero. El gol, un tiro de rosca clavado con la pierna izquierda tras orientarse el pase atrás de Lamine Yamal. Este triunfo lleva el sello del MVP Dani Olmo, con más hambre que nunca de reivindicarse. El niño prodigio vuelve a casa convertido en una estrella aspirante a liderar una constelación. La espera eterna para su inscripción valió la pena. Con esto, su primera noche de brillo quedará manchada por la oscuridad de una nueva fatalidad. Ser culé es un oficio de riesgo.

Golpe duro

La desgracia ha vuelto a golpear al barcelonismo. Un mazazo que evoca el recuerdo de Ansu Fati, uno de los elegidos para coger el testigo de Leo Messi. El 10 azulgrana se rompió el menisco interno de la rodilla izquierda en noviembre de 2020 en la que debía ser la temporada de su eclosión definitiva. El calvario de lesiones posterior que abarcó hasta la actualidad es conocido por todos. El delantero de 21 años todavía lucha por levantar cabeza y dejar atrás la pesadilla de dolencias musculares.

Un temor que es inevitable trasladar a Marc Bernal. A la espera de pruebas médicas, Javier Miguel, colaborador de Culemanía, ha desvelado la lesión en el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda tras las primeras exploraciones. A la espera de un diagnóstico médico, todo apunta que el mediocentro de 17 años se perderá la temporada entera. 

Pedri, falsa alarma

De un segundo a otro, la vida puede dar un giro radical. El Barça se las prometía felices tras una remontada de 90 minutos. Pero César Soto Grado ha decidido añadir 12 minutos. Tiempo más que suficiente para que se presente la desgracia, y no en forma de gol encajado. En una entrada que tendría que carecer de mayor importancia, la promesa de Berga ha sufrido un impacto fortuito de Isi Palazón en el lateral de la rodilla. La colisión en el balón dividido ha bastado para que el canterano azulgrana haya tenido que abandonar el terreno de juego apoyado en el hombro de los servicios médicos.

Por su parte, Pedri ha dado el susto en el minuto 88, tras una dura entrada de Pathé Ciss. El centrocampista senegalés ha impactado con los tacos sobre la tibia del volante canario. El árbitro le ha enseñado la tarjeta amarilla, pese al riesgo de lesión. El tobillo del pie de apoyo se le ha doblado ligeramente. El 8 barcelonista se ha quedado tendido en el césped unos minutos, hasta marcharse sustituido por precaución. Flick ya ha confirmado que "está bien, solo se llevó un golpe".