Dani Olmo no pudo pedir un debut más perfecto con el FC Barcelona. Después de esperar dos jornadas para jugar con el equipo azulgrana, el centrocampista logró vestirse de héroe en la meritoria remontada (1-2) contra el Rayo Vallecano. La entrada del fichaje estrella de Joan Laporta en la segunda mitad permitió a los de Hansi Flick mejorar colectivamente, además de aportar el gol de la sufrida victoria por el polémico arbitraje de Soto Grado y las lesiones de Pedri y Marc Bernal.
Fueron dos versiones del Barça en Vallecas. La primera mitad fue espesa, donde el equipo apenas tuvo juego interno y ocasiones de gol. La segunda parte fue todo lo contrario, con un Dani Olmo que cambió la cara del encuentro. El futbolista mezcló a la perfección con la magia de Lamine Yamal y Pedri, que fue el autor del tanto inicial de la complicada victoria que permite al FC Barcelona mantener su invicto en la Liga.
El Barça más irregular
El FC Barcelona tuvo la primera mitad más irregular en la era Hansi Flick. El Rayo se mostró como un equipo serio en su posicionamiento sin balón, provocando errores en la salida de los azulgranas y castigando los costados con la verticalidad de los extremos. De esa forma aparece el gol de la apertura, después de Jorge De Frutos desde la banda derecha para un Unai Hernández que remató al primer palo. Una acción que deja a Ter Stegen como uno de los grandes señalados por su lenta reacción.
Hasta el minuto 25 no hubo una respuesta significativa del cuadro azulgrana. El Barça logró progresar varias veces desde la banda derecha con las participaciones de Lamine Yamal. El canterano fue el primer guía del equipo en ese tramo de dudas, sobre todo con su calidad para superar la marca de los rivales. Casi todo el juego ofensivo de los de Hansi Flick se enfocó en ese costado del campo, teniendo en cuenta que Ferran Torres y Gerard Martín no consiguieron amenazar en los metros finales.
Debuta Dani Olmo
La espesura en la mitad de cancha obligó a Flick a tomar cartas en el asunto. Ferran Torres fue el primer cambio para dar ingreso a Dani Olmo, que finalmente pudo debutar con la camiseta del Barça. El fichaje estrella de Laporta tuvo influencia inmediata en la segunda mitad, sobre todo a partir de sus controles, giros y último pase. El FC Barcelona jugó a otro ritmo con el centrocampista ofensivo y sometió por completo al Rayo Vallecano.
Tanta insistencia tuvo su recompensa en el minuto 60 con Pedri como el principal protagonista. La jugada del empate azulgrana contó con la complicidad de Raphinha, que recibió el esférico en el sector izquierdo y lo envió justo al área para la recepción posterior disparo de zurda del centrocampista canario. Se hizo justicia en Vallecas por el inmenso dominio del FC Barcelona.
Se viste de héroe
Las polémicas arbitrales intentaron tumbar el espíritu combativo del Barça. Primero con un potencial penalti sobre Dani Olmo y posteriormente con el gol anulado a Lewandowski por una presunta falta de Koundé en el inicio de la jugada. Todo apuntaba a ser otra noche dolorosa en el feudo del Rayo, pero Olmo demostró en su primer partido como azulgrana su enorme calidad dentro del área.
Lamine Yamal hizo magia en la banda derecha para llegar hasta línea de fondo y dar un balón preciso a Dani Olmo, cuyo zurdazo fue imposible de atajar para Dani Cárdenas. Los dos canteranos del Barça bailaron en una jugada espectacular y también lo hicieron con unos pasos que demuestran la notable sintonía dentro del conjunto azulgrana.
El tramo final del partido exigió al FC Barcelona sacar mucha garra. Las lesiones de Pedri y Marc Bernal provocaron que el equipo azulgrana sufriera en el tiempo añadido. El Barça sacó mucha personalidad para defender el resultado y así llevarse un triunfo que mantiene el invicto en la Liga. Tres de tres que posicionan a los culés como los líderes en solitario de la competición.