La Champions League ha terminado para el FC Barcelona esta temporada. Un año más. Las alegrías no duran demasiado en la capital catalana. El equipo azulgrana no logra salir de un círculo vicioso que siempre acaba mal en el máximo escaparate europeo, la Copa de Europa. El París Saint-Germain derrotó al Barça (1-4) en Montjuïc, cuando los culés soñaban con levantar la sexta orejona.
Tampoco ha tenido tiempo de sonreír Vitor Roque. El delantero brasileño no ha disputado ni un solo minuto en la Champions League bajo las órdenes de Xavi Hernández. Llegó en el mercado de invierno y ha tenido hasta cuatro oportunidades para ayudar al primer equipo del Barça, pero el entrenador de Terrassa ha considerado que el joven futbolista no estaba preparado.
El tigre no ruge
Tigrinho pudo haber sido de ayuda en la eliminatoria de los octavos de final contra el Nápoles. En el Diego Armando Maradona, su instinto goleador podía haber roto el empate en el marcador, en un partido que el Barça tenía dominado (1-1). En la vuelta en casa, cuando todo estaba bajo control (3-1), Xavi tampoco apostó por él.
Lo mismo ha sucedido contra el PSG. Vitor Roque no jugó ni un solo minuto en el Parque de los Príncipes, en un partido abierto y con espacios. El encuentro acabó con muchos goles (2-3) y el ariete carioca es un jugador que ataca bien los espacios. En casa, en Montjuïc, con la eliminatoria prácticamente sentenciada, Xavi tampoco le hizo debutar.
Apuesta de Deco
El fichaje de Vitor Roque fue una apuesta personal del director deportivo, Deco. El Barça pagó por el punta brasileño 30 millones fijos más 31 en variables. La cantidad es muy abultada, pero el club paga la cifra en plazos de cinco millones que se abonan al Athletico Paranaense cada seis meses.
Xavi no está confiando en Tigrinho y, desde su entorno, no entienden la falta de minutos. Creen que puede ver portería en cada partido. El entrenador del Barça, que dimitirá a final de temporada, considera que Vitor Roque aún no se ha adaptado.