El FC Barcelona tiene bastante claro la hoja de ruta que quieren seguir a lo largo del mercado de verano. La situación financiera obliga al club a mantener su planificación lo más limitada posible, por lo que en parte facilita el trabajo de Mateu Alemany con respecto a las altas y bajas que debe asegurar antes de finalizar la ventana de traspasos. El director de fútbol de la entidad tendrá la misión de dar forma definitiva a la plantilla que quiere Xavi Hernández para la próxima temporada.
Los fichajes confirmados
En este sentido, Alemany ya ha logrado cerrar de manera oficial a un par refuerzos clave para el elenco azulgrana. Nos referimos a Ilkay Gundogan e Iñigo Martínez, dos futbolistas que llegaron a coste cero tras finalizar sus contratos con el Manchester City y Athletic Club, respectivamente. Ambos fueron anunciados por el Barça, por lo que fueron las primeras carpetas cerradas por el mencionado ejecutivo.
Otro jugador que están cerca de oficializar es Vitor Roque. El brasileño es uno de los objetivos más importantes del verano, teniendo en cuenta que la operación podría cerrarse en torno a los 35 millones de euros (más 10 en variables). Las dos partes ya llegaron a un acuerdo, a falta la revisión final de los documentos para dar por concluida las negociaciones. Se trataría entonces de la tercera alta del mercado para el FC Barcelona, aunque todavía hay espacio para otros refuerzos.
Los demás objetivos de Alemany
La lista de altas todavía no ha cerrado para el FC Barcelona. La dirigencia azulgrana tiene entre sus planes el fichaje de un mediocentro para que sea el relevo de Busquets en la plantilla. Se trata de un objetivo que ha tenido bastantes complicaciones, debido a que han ido cayendo candidatos a lo largo de las semanas --Zubimendi, Kimmich y ahora Brozovic--, por lo que Alemany debe tomar en cuenta a jugadores más accesibles en el mercado, como es el caso de Oriol Romeu o Dani Parejo. Entre ambos estaría el futuro pivote del elenco culé.
También será clave la resolución del caso de Arda Güler. La perla de Turquía ha sido pretendida por la entidad catalana, que incluso dio un paso adelante al enviar a Deco para negociar con su entorno. Las negociaciones parecían ir por buen puerto, pero una oferta de última hora del Real Madrid ha supuesto una piedra en el camino. El Barça todavía no da por perdido al joven futbolista, aunque sí empieza a ser una operación cuesta arriba.
Otros casos a considerar son los de Abde y Nico González. Ambos deben regresar a las instalaciones de la Ciutat Esportiva, después de terminar sus respectivas cesiones en Osasuna y Valencia. En el caso del primero, la expectativa es que realice la pretemporada con el equipo de Xavi Hernández y así determinar el plan con el jugador para la siguiente temporada; mientras que con el segundo existen más dudas sobre su continuidad, debido a la poca confianza que tiene el egarense en el joven centrocampista.
La operación salida, en marcha
El FC Barcelona necesita, de forma urgente, acelerar la operación salida. El club no está en las mejores condiciones financieras, por lo que resulta fundamental la marcha de aquellos futbolistas que no cuentan para el proyecto. En este sentido, Alemany ya ha logrado aligerar bastante la plantilla con la baja de tres figuras importantes como lo son Gerard Piqué, Jordi Alba y Samuel Umtiti, recientemente rescindido de su contrato. Aunque todavía queda mucho trabajo por delante.
En el panorama de los cedidos, el ejecutivo tiene la misión de lograr la salida definitiva de Sergiño Dest, Gustavo Maia, Álex Collado y Clement Lenglet, cuyo caso estaría cerca de resolverse ante el interés del Tottenham Hotspur de hacerse con los servicios del central francés. De ese caso en concreto, el Barça espera obtener un mínimo de 10 millones de euros.
De igual forma, también es importante destacar la posibilidad de lograr una venta importante en verano. El candidato que gana enteros para salir del club es Franck Kessié, teniendo en cuenta la enorme competencia que tiene en la mitad de cancha. Al centrocampista marfileño podrían unirse alguno de los atacantes del Barça, como es el caso de Raphinha o Ferran Torres, aunque dependerá de la predisposición de los futbolistas para aceptar otro destino.