Laporta rechaza ofertas para Barça Studios de Arabia y Qatar

El FC Barcelona se apresura a cerrar las últimas operaciones financieras con tal de cuadrar cuentas antes del 30 de junio. El club presidido por Joan Laporta confía en cerrar el ejercicio económico 23-24 en números verdes. Todo dependerá de los tratos en curso para la renovación del patrocinio con Nike y el aterrizaje de un nuevo sustituto a Libero Football Finance accionariado de Barça Vision --antes Barça Studios--. Sobre esta última línea de negocio, la entidad ha preferido no pillarse los dedos y ha rechazado ofertas de Arabia Saudí y Qatar.

La institución catalana mantendrá socios ya existentes en el accionariado de Bridgeburg Invests, al menos, por el momento. Los negocios con el golfo Pérsico tendrán que esperar. Más allá de las connotaciones éticas de aliarse con un país otrora tachado de "dictadura islámica" por Laporta, el estallido del caso Brodie ha decantado la balanza. La trama en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) durante el mandato de Luis Rubiales salpicó a Gerard Piqué con su imputación. De ahí que en can Barça quieran andar con pies de plomo. 

Piqué, imputado por la Supercopa

La jueza Delia Rodrigo, instructora de la causa que reúne todos los contratos irregulares emitidos por la RFEF entre 2018 y 2023, investiga a la leyenda azulgrana por las comisiones de la Supercopa de España. El propietario de Kosmos Football, S.L. se embolsa a través de su holding cuatro millones de euros anuales por cada temporada que la Supercopa de España se celebra en Arabia Saudí.

Hasta ahí, sin problemas. Sin embargo, dos hechos levantan sospechas sobre un posible delito de corrupción en los negocios, es decir, el pago de sobornos a cambio de obtener ventajas. Primero, la "obligación esencial" de abonar la "tarifa de éxito" a Piqué por parte de SELA, operador comercial de la Autoridad General de Deportes en Arabia Saudí. En caso de no ingresarle la prima de 4 millones al comisionista, el trato podía colapsar, tal y como advertía el contrato firmado por el organismo saudí y la RFEF.

En segundo lugar, cuando el trato prosperó en 2019, el noi de la Bonanova jugaba para el FC Barcelona. El club azulgrana gozó de una ventaja económica al asegurarse más de 6 millones de euros por cada edición del torneo. Misma cifra que el Real Madrid, pero sensiblemente superior al resto de participantes. En la Supercopa de 2024, el Osasuna cobró un millón y el Atlético, tres.

Un inversor ya existente

En plena investigación, el Barça ha preferido cubrir el impago de 40 millones por su división de NFT's, Web3 y metaverso con inversiones ya existentes. Nada de nuevos accionistas, pues el experimento fallido de Libero, fondo alemán, sirvió de aprendizaje.

En verano de 2023, el último tripulante en subirse al barco --9,8% de las participaciones-- se comprometió a abonar 40 kilos repartidos en dos vencimientos; incumplió ambos. Vestigia Holdings, también nuevo socio procedente de Chipre --19,7%, sí que cumplió su parte del trato y desembolsó 20 millones.

El objetivo inminente pasa por reponer los 40 millones adeudados mediante un accionista ya existente que asuma más participaciones. Sobre el papel, Socios.com y Orpheus Media todavía comparten el 20% del pastel digital. Respecto a los otros 60 millones acordados para recibir en 2024, según desveló RAC1, el plazo se habría prorrogado hasta el 15 de septiembre. 

Dos pájaros de un tiro

Los últimos días de junio pueden dar muchas alegrías institucionales al barcelonismo. Joan Laporta lo anunció en la última reunión ordinaria del senado de la entidad: "Este año el presupuesto ordinario del club dará positivo". Las operaciones con Nike y Barça Studio se han cocido a fuego lento y parece ser que la plana mayor encabezada por Laporta volverá a cantar fumata blanca sobre la campana.