Joan Laporta respira aliviado. El FC Barcelona pudo sentirse nuevamente grande en Europa, tras la victoria del equipo azulgrana (3-1) contra el Nápoles. Es un triunfo con mucho significado para los altos mandos del club azulgrana, sobre todo en términos de prestigio deportivo e impulso financiero. Dos apartados que necesitaba con urgencia la junta directiva del Barça en un curso de mucha irregularidad.
En este sentido, el dirigente de la entidad culé puede sonreír en estos momentos, debido a que la victoria de la plantilla dirigida por Xavi Hernández permite clasificar a los cuartos de final de la Champions League, lo que no sucedía desde hace cuatro años. El pase a la siguiente ronda no solo vuelve a ubicar al Barça entre los ocho mejores de Europa, sino también ingresar 10,6 millones de euros.
Tampoco hay que pasar por alto que jugar otro partido en Montjuïc permitirá al Barça sumar más ingresos en concepto de ticketing, donde podrían caer hasta 4-5 millones de euros en función del aforo de ese día. En total: el club recibe una bombona de oxígeno en forma de 15 kilos. Ya con esa cantidad el FC Barcelona cumple con lo presupuestado en la máxima competición continental, lo que supone un alivio por los problemas que ha tenido la cúpula azulgrana en la generación de ingresos.
Tranquilidad para Laporta
El triunfo del primer equipo también representa mucha tranquilidad para Laporta. En las horas previas al partido contra el Nápoles se llegó a conocer una convocatoria de algunos socios para hacer llegar al mandatario la preocupación por la gestión deportiva y financiera del club, aunque estaba condicionada a si el resultado final era negativo. Se trata de una bala esquivada para Jan en cuanto al descontento de una parte de la masa social.
Con la irregularidad futbolística del Barça, los focos de las críticas han empezado a caer sobre el palco. Laporta necesitaba con urgencia una noche de alegría en un escenario tan importante como lo es la Champions League. Por ahora, ubicarse entre los ocho mejores de Europa supone una imagen de mayor estabilidad en el proyecto deportivo, sobre todo en un tramo de la temporada en la que tanto se habla del sucesor de Xavi Hernández.
El Barça se asegura la posibilidad de mantenerse en la disputa de un título hasta el mes de abril. La Liga es un terreno complicado por la ventaja del Real Madrid, pero seguir vivos en un torneo como la Champions League supone un poco más de tiempo de tranquilidad para Laporta.
Y ahora... el Mundial de Clubes
Ahora el interés de la junta directiva del FC Barcelona es que el equipo azulgrana sea capaz de asegurar su clasificación a la primera edición del nuevo Mundial de Clubes. El torneo organizado por la FIFA, que se celebrará el próximo año, implica que los participantes puedan ingresar hasta 50 millones de euros, aunque la cifra crece hasta los 100 kilos para el equipo que termine alzando la copa.
De momento, el Barça no tiene asegurada su clasificación, pero la victoria contra el Nápoles le acerca a solo tres puntos del Atlético de Madrid --tienen 62 puntos--, el otro equipo español que se encuentra entre los clasificados momentáneos de la competición. La esperanza de los culés es que el cuadro colchonero pierda los octavos de final contra el Inter de Milán para evitar que sumen más puntos en el acumulado total. Esa combinación de resultados mantiene vivo el objetivo de ganar 50 millones en 2025.