Mateu Alemany agota sus últimos días como director de fútbol en el FC Barcelona. El aterrizaje de Deco en la dirección deportiva en sustitución de Jordi Cruyff y con plenos poderes restó autoridad al ejecutivo mallorquín en el club. Tras decidir hacer las maletas, el Barça y el todavía integrante de la secretaría técnica pactaron su desvinculación para el próximo 2 de septiembre. Hasta entonces, Alemany intentará cumplir en la sombra con un último servicio consistente en culminar 15 salidas y 6 fichajes.
El éxodo de futbolistas de Can Barça perseguía el objetivo de rebajar una masa salarial excedente en términos de Fair Play financiero. Tras un verano de 2022 opulento y la incorporación de fichajes de renombre como Robert Lewandowski, Jules Koundé y Raphinha, la suma de los sueldos se enfiló hasta los 656 millones de euros. Para rebajar el lastre salarial a poco más de 400 millones, pesos pesados del vestuario como Jordi Alba, Sergio Busquets y Gerard Piqué hicieron las maletas. Entre los tres integraban un coste de 115 millones al Barça en 2022, fruto del salario anual más el diferimiento del 70% de sus fichas pactado en 2021.
Piqué, el pionero
El paso a un lado de Piqué en noviembre de 2022 inauguró una desbandada de jugadores que todavía no ha tocado a su fin. Todavía tenía temporada y media de contrato en vigor hasta junio de 2024, salario que perdonó. Aun así, el club azulgrana le ha abonado el sueldo correspondiente al primer semestre del curso 2022-23 --10,35 millones brutos-- y le debe otros 17,35 diferidos de la campaña 2020-21.
Le siguieron Héctor Bellerín, que fracasó en su segunda etapa como futbolista barcelonista y se desvinculó el 31 de enero de la entidad, y Memphis Depay. El delantero neerlandés firmó por el Atlético de Madrid a cambio de 3 millones fijos, uno variable y una opción de compra preferencial por Yannick Carrasco que la directiva del Barça no ha ejercido.
12 salidas este mercado
Sin contar las marchas definitivas de Antoine Griezmann y Trincao, que ya habían partido en sendas cesiones, el Barça quiere sellar otras 12 salidas en esta ventana de traspasos veraniega. Sergio Busquets dio ejemplo como capitán al término de la temporada pasada y declinó renovar contra las intenciones del técnico azulgrana, Xavi Hernández. El Barça liberó un sueldo de 22 millones, crucial a estas alturas para optar a las contrataciones de Joao Cancelo y Joao Félix.
Jordi Alba tomó la misma determinación, rumbo al Inter Miami después de acordar la rescisión de su contrato, que expiraba en junio de 2024. Otros 17,6 millones de ficha ahorrados oxigenaron la economía del club presidido por Joan Laporta. Samuel Umtiti, cuyo contrato se liquidó por los 20 millones abonados al central francés de una tacada, y Álex Collado --sueldo muy bajo-- completaron la ronda de rescisiones.
Nico González dio continuidad a la segunda oleada de marchas, vendido al Oporto por 8,4 millones y con opción de recompra de 30 millones. También Julián Araujo, cedido a Las Palmas por una temporada.
46 millones ingresados
Tras negociar las rescisiones de contratos convertidos en losas económicas, llega el turno de las ventas puras. La necesidad de ingresos y generar Fair Play financiero desembocó en la venta de Franck Kessié al Al Ahli saudí, que desembolsó 12,5 millones de euros.
En cambio, la salida de Ousmane Dembelé sí que cogió desprevenida a la directiva azulgrana, que tuvo que conformarse con los 25 millones más 400.000 euros ingresados por el extremo galo. Los otros 25 millones de su cláusula de rescisión --24.600.000 euros-- los cobró el jugador como parte del pacto firmado en su renovación de 2022. En total, Nico, Dembelé y Kessié reportarán 46,3 millones a las arcas barcelonistas en concepto de traspaso.
Cesiones
En última instancia, Pablo Torre emprendió el camino a Girona, para jugar como cedido en el equipo satélite del Manchester City. El volante cántabro cambió de club hasta junio de 2024 en el marco del fichaje de Oriol Romeu por el Barça. En dicha fecha también volverá Sergiño Dest. Hasta entonces, el PSV asumirá la mitad de la ficha del lateral norteamericano. Aparte del ahorro de 5,4 millones --sobre un salario de 10,8-- la directiva azulgrana acordó una opción de compra y un porcentaje de futura venta con el conjunto de la Eredivisie.
A la espera de oficializar las operaciones, Ansu Fati y Clément Lenglet aguardan con tal de volar a Inglaterra. El delantero de 20 años jugará un año cedido en el Brighton Albion, que cubrirá el 80% de una ficha que oscila entre los 14 y 16 millones de euros. La salida del atacante resulta indispensable para el aterrizaje de Joao Félix a préstamo en la capital catalana, todavía una incógnita. El central francés jugará un año en el Aston Villa en otra cesión pura sin opción de compra. En este caso, no ha trascendido el porcentaje del salario que asumirán los villanos, pero ayudará a dar luz verde al fichaje de Joao Cancelo por el Barça.
Seis fichajes
A principios del mercado de verano, Ilkay Gundogan e Iñigo Martínez inauguraron el capítulo de llegadas a la Ciudad Condal como agentes libres, tras vencer sus respectivos contratos. Les siguió Oriol Romeu, el sustituto de circunstancias de Busquets ante la limitada capacidad económica del conjunto barcelonista para firmar un pivote posicional de élite. El mediocentro de Ulldecona costó 3,4 millones y la cesión de Pablo Torre. También se confirmó el fichaje de campanillas: Vitor Roque. El delantero brasileño de 18 años recalará en Can Barça en enero de 2024 por 30 millones fijos y 31 variables, procedente del Athletico Paranaense.
Con el interrogante permanece Joao Cancelo hasta la bocina de la ventana de traspasos, este 1 de septiembre a las 23:59 horas. El agente del lateral, Jorge Mendes, y la directiva azulgrana, ya han alcanzado la entente con el Manchester City. No obstante, el impago de los 20 millones acordados con Libero Football Finance por la reventa de Barça Vision retrasa la operación. El fichaje consistirá en una cesión sin opción de compra --por prisas con el Fair Play se retiró-- hasta junio de 2024.
Aún más negro lo tiene Joao Félix, a quien debe salvar el aval pactado con el Banco Sabadell por Joan Laporta y la plana mayor azulgrana, por valor de 10 millones. El Atlético de Madrid quiere cobrar 8 kilos como tasa de cesión, sacrificio que el Barça no asumirá. De las concesiones del club rojiblanco dependerán unas negociaciones que se desarrollan contra reloj.
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