La Guardia Civil cree que los pagos a Negreira acababan en directivos del Barça
Nuevo capítulo en la investigación dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona
6 junio, 2023 13:13Noticias relacionadas
El Barçagate de Enríquez Negreira recuerda, por momentos, a la serie Lost. Cambios de guion constantes, discrepancias entre la ciudadanía y la sensación de que el debate nunca terminará. La cuestión es que, en las últimas horas, se ha dado un nuevo capítulo en la investigación.
Según las últimas informaciones desveladas, los millonarios pagos del Barça al exvicepresidente de los árbitros y a su hijo --que ascienden a 7,3 millones-- no eran para comprar árbitros, sino que se sospecha que fuesen en realidad sobresueldos para altos cargos del club azulgrana.
La sospecha creciente en la Guardia Civil
Una estrategia interna de blanqueo de capitales, en definitiva, a través de las sociedades de Enríquez Negreira. Tal y como informa El Mundo, la investigación está centrada ahora en esclarecer cómo el dinero regresaba al FC Barcelona mediante un entramado societario con exdirectivos del club, que actuaban como intermediarios.
Mientras tanto, crecen las sospechas en la Guardia Civil de que el dinero abonado al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), José María Enríquez Negreira, y a su hijo Javier Enríquez, eran sobresueldos que salían de la entidad para volver a los bolsillos de miembros del club. Una hipótesis que no es una certeza, ni mucho menos, sino que deberá ser comprobada.
El delito de corrupción deportiva pierde fuelle
La investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona, se está centrando en perseguir estos movimientos de capital y deja en un segundo plano, aunque todavía no lo ha descartado del todo, la posibilidad de que estas cantidades fueran destinadas a la compra de árbitros. Esta última opción es cada vez más remota, estando ya casi descartado el delito de corrupción deportiva.
Miembros de la Guardia Civil, en cualquier caso, han trasladado al Juzgado un informe en el que comunican sus primeras conclusiones: que los pagos realizados por las diversas juntas del Barça, desde 2001 hasta 2018, a las sociedades Negreira y su familia podrían haber acabado en manos de algunos directivos y altos cargos del club de forma fraudulenta. Algo, cabe recalcar, que todavía no está comprobado y deberá ser refrendado con pruebas fehacientes.