Las horas más bajas de Luis Enrique: ¿Habría ganado al Barça sin la expulsión de Araujo?

Luis Enrique ha pasado por Barça B, Celta, Roma, el primer equipo del Barça, selección española y PSG como entrenador. Antes de recalar en el conjunto francés, solo había ganado títulos en el banquillo del Barcelona. Es donde ha triunfado. Sin embargo, se tomó la eliminatoria de Champions League contra su exequipo de manera personal. Lanzando dardos a Xavi Hernández. "Juegan al pelotazo. Ter Stegen batió el récord de pases largos. Juegan como el Eibar", recalcó el técnico asturiano en su documental.

Pero la realidad es que el Barça ganó en el Parque de los Príncipes (2-3). E iba ganando en casa hasta la expulsión de Ronald Araujo. Es decir, llevaba una ventaja de dos goles a los pocos minutos de empezar la vuelta de los cuartos de final. La derrota fue muy dolorosa. Los de Xavi ya se veían en la final. El propio Raphinha lo ha admitido: "Salí triste del último partido, porque veía que estábamos cerca de llegar a una final y ganarla. Pero lo que pasó, pasó. Fue una lástima".

Luis Enrique tiene una opinión distinta a la del brasileño. En la rueda de prensa posterior al choque en Montjuïc, no declaró nada sobre la expulsión. Sin embargo, aseguró que el resultado de la eliminatoria fue justo. "Ha sido muy difícil jugar contra el Barça y espero no jugar más, pero me siento contentísimo. Hemos empezado de manera espectacular. No merecimos encajar un gol, pero lo encajamos", agregó Lucho.

Una expulsión lo cambia todo

El desenlace es imposible de predecir. Se necesitaría una bola de cristal. Pero, quitando merecimientos, el Barça tenía una ventaja de dos goles en el marcador general de la eliminatoria, algo muy difícil de remontar. Con once jugadores, quizás el PSG hubiera empatado. Con 10 futbolistas ya era casi imposible.

Al Barça de Hansi Flick le ha sucedido lo mismo. En la primera jornada de la Copa de Europa, en esta nueva Champions, un error de Ter Stegen dejó a los azulgranas con uno menos. Acabaron perdiendo contra el Mónaco (2-1).

La asignatura pendiente del PSG es la Champions League y, de momento, el conjunto de Luis Enrique ha ganado uno, contra el Girona, y ha perdido el otro, ante el Arsenal. Solo ha ganado un partido de los últimos cuatro.