Ni Tibu-Rón ni el Vivero: el restaurante al que acude Hansi Flick (de moda en el Barça) en las costas del Garraf

La gastronomia es uno de los motivos que atrae y retiene a los futbolistas del FC Barcelona en Cataluña. Las nuevas incorporaciones del club azulgrana quedan encantadas con la comida mediterránea, amén del clima. El entrenador del Barça, Hansi Flick, también es persona más allá de sus obligaciones en el banquillo.

Aunque visite los partidos del filial en su tiempo libre, disfruta igualmente de su tiempo libre fuera de los terrenos de juego. Lejos de su vivienda en Sarrià-Sant Gervasi, el técnico alemán se ha acercado a comer a uno de los restaurantes favoritos de los cracks azulgranas en la comarca de El Garraf: la Cúpula Garraf.

Lugar preferido

Este espacio gastronómico, a los pies de la costa mediterránea, ofrece las vistas más espectaculares del mar desde su terraza. Como su nombre ya indica y se aprecia en el techo, el local tiene forma de cúpula.

No estamos descubriendo América, pues se trata de un restaurante que ya frecuentaban los jugadores de todas las secciones del Barça. Sin ir más lejos, meses atrás Joao Félix se presentó con sus amigos del hockey, Joao Rodrigues, y del fútbol sala, Erick Mendonça y André Coelho.

La misma cuenta de @lacupulagarraf en Instagram ha inmortalizado la visita de Flick junto al dueño Marc Fauste. De calle, pero elegante, el genio germano viste un chaleco gris y una camisa abierta debajo, con una camiseta blanca y pantalón ajustado. Otros cracks de la talla de Vitor Roque, Fermín López, Joao Cancelo, Pedri, Frenkie de Jong, Lamine Yamal, Xavi Hernández, Alexia Putellas, Claudia Pina o Mariona Caldentey también se han dejado caer por este lugar de ocio.

Especialidad de pescados

Como no podía ser de otra forma, la Cúpula ofrece una carta de cocina local y de proximidad. Y de platos accesibles a todo el mundo como las gambas de Vilanova, hasta entrantes de lujo como el caviar imperial beluga, por 39,50 euros. En la carta de pescados en la variedad se encuentra el gusto.

Uno se puede decantar por los berberechos al vapor, a 19,20 euros, el lenguado a la ñocla con menière de frutos secos y limón, a 26,80 euros, o probar una gran parrillada para dos comensales. Esta última incluye mejillones, almejas, gambas, cigalas, vieras, bogavante, navajas y rape por 139,50 euros.

Carta variada

Para los amantes de los arroces pueden acompañar el bogavante de una caldereta de arroz por 32,10 euros, o probar el arroz caldoso con cigalas a 27,80 euros. Hasta sirven fideuá de verduras a 20,50 euros para veganos.

No teman los enamorados de la carne, porque la Cúpula también les reserva un lugar especial en la carta, con media espaldita de cordero al horno con patata panadera a 23,70 euros. También tienen la opción de comer solomillo de ternera a la pimienta verde por 28,80 euros, o a la brasa con patatas fritas o verdudas por 27,30 euros. La opción más económica es el entrecot de buey a la brasa con verdudas y mayonesa de Dijon, por 23,60 euros.