La primera entrega de la nueva edición de Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition estuvo marcada por la tensión y los rifirrafes. En concreto entre el anfitrión de la cena, Gianmarco Onestini, y la ganadora de Gran Hermano 16, Sofía Suescun. ¿El motivo? El breve pero intenso romance entre el italiano y Adara Molinero.

Ya desde el inicio de la cena la hija de Maite Galdeano estuvo criticando el menú de Onestini, unos spaghetti de la sonrisa. “Empalagoso… has dicho empalagoso cinco veces. Empiezas a quejarte cuando acabas de entrar”, le ha recriminado el italiano. A partir de ese momento las pullas no han dejado de lanzarse entre ambos. Hasta que Sofía ha explotado.

Dardos envenenados

“Entiendo que tengas envidia de mi relación [con Kiko Jiménez] porque la tuya [con Adara Molinero] duró dos meses”, le ha atacado Suescun directamente. La comentada relación entre Gianmarco y la ganadora de Gran Hermano VIP comenzó precisamente en ese concurso, donde Molinero decidió apostar por él y dejar su anterior relación con Hugo Sierra. Sin embargo, al poco tiempo, vieron que no eran compatibles.

“No aguantabas más porque no podías llevas más allá el teatro que te marcaste con Adara”, ha continuado Sofía. Al italiano se la ha cambiado la cara ante esos ataques y ha optado por contestarle seco y directo: “Eres inaguantable, la verdad”. Aún así, la pamplonesa ha seguido metiendo el dedo en la yaga: “Lo mío es amor real, lo tuyo fue teatro”.

Silencio

El finalista de Supervivientes ha optado por guardar silencio y no mencionar el triste final que tuvo su relación con Adara. Hace unos días, cuando se enteró de su ruptura con Rodri Fuertes, Onestini aseguró que no quería hablar del tema porque para él “Adara ya es pasado”.

Tweet de Sofía Suescun / @sofiasuescun

Sin embargo, parece que a Sofía le gusta picar al italiano, no solo en la cena, sino también por Twitter. El programa que se emitió anoche ya estaba grabado, por lo que la joven estuvo contestando al italiano a todos los comentarios que hacía en la red social. “Hoy no duermo”, le comentaba con ironía. Unos rifirrafes que parece que se van a alargar hasta la eternidad.