Iker Casillas y Sara Carbonero, una historia de amor marcada por los problemas de salud

Después de meses de rumores, la revista Lecturas ha confirmado que Sara Carbonero e Iker Casillas, la pareja que enamoró a todo el país en el Mundial de Sudáfrica, ha puesto fin a su historia de amor tras 11 años de relación.

Según la publicación, el matrimonio llevaría varios meses viviendo por separado. Mientras que Sara se habría quedado en la vivienda que la familia tiene en La Finca (Madrid), el exguardameta habría alquilado una casa muy cerca de la que residen su mujer y sus hijos.

Infarto

Los últimos años de vida del matrimonio en Portugal fueron muy duros. Iker Casillas sufrió un infarto durante un entrenamiento con el Porto FC el 1 de mayo de 2019. Desde ese momento, el portero dejó a un lado los guantes para recuperarse y, al poco tiempo, abandonó el fútbol profesional.

Sara Carbonero explicó en un documental del portero para Movistar+ cómo recibió la noticia: “Yo estaba en Cádiz, había estado dos días por trabajo. Cogimos un vuelo con total normalidad hacia Madrid donde yo tenía que hacer una escala de 30 o 40 minutos para coger mi vuelo a Oporto”, explica. En ese momento, su amiga Ana se acercó a ella y le dijo: “Sara, estate tranquila. A Iker le ha dado un infarto”.

Cáncer de ovario

Un mes después del problema de salud del futbolista, los médicos diagnosticaron cáncer de ovario a la periodista. Ella misma confesó su estado por sus redes sociales: "Hace unos días en una revisión, los médicos me vieron un tumor maligno en el ovario y ya he sido operada". 

En aquel momento, todavía le quedaban “unos meses de lucha” con un tratamiento, pero se mostró feliz. "Estoy tranquila y con la confianza de que todo va a salir bien", explicó en la publicación en su Instagram. Además, aprovechó para pedir a sus compañeros de profesión "el respeto y la comprensión" que merecía un suceso como ese.

Hospitalizada

El pasado mes de febrero, Sara Carbonero fue hospitalizada y operada de urgencia. Los primeros rumores hablaban de una posible recaída del cáncer de ovarios, pero días después se confirmó que su ingreso no tenía nada que ver con eso.

Una semana después de su operación, Sara abandonó, con muy buen aspecto, la Clínica Universitaria de Navarra en coche y acompañada por su gran apoyo, Iker Casillas. El portero estuvo a su lado durante toda la hospitalización y la acompañó en un momento tan duro. Sin embargo, rumores ahora confirman que en ese momento ya no estaban juntos.