Uno de los coches autónomos de la compañía china Didi / DIDI

Uno de los coches autónomos de la compañía china Didi / DIDI

Business

La china Didi adelanta a Uber con sus coches autónomos

La compañía dispone de una flota de 30 vehículos sin conductor que tiene a prueba en Shanghai y otras dos ciudades del país asiático

20 febrero, 2020 00:00

La compañía Didi, también conocida como el Uber chino, ha adelantado a su gran competidor estadounidense. Uber prometió que tendría coches autónomos antes que nadie a disposición de su amplia parroquia, y lo intentó. Pero uno de sus vehículos sin conductor atropelló mortalmente a una mujer de 49 años, Elaine Herzberg, durante una prueba llevada a cabo en Colorado (Estados Unidos). El coche no detectó a esta persona, que cruzaba con su bicicleta a cuestas fuera de un paso de peatones, y la empresa norteamericana aparcó el proyecto y dejó en el aire su apuesta por ser los primeros del mundo en contar con taxis sin conductor.

Ahora, Uber ha obtenido de nuevo autorización para probar sus coches autónomos por parte de las autoridades de California en carreteras públicas de ese Estado, pero la multinacional no se ha pronunciado sobre cuándo retomara el proyecto y, sobre todo, Didi ya va por delante. En estos dos años de ausencia de Uber, la compañía oriental no ha parado de realizar pruebas con éxito y ya ofrece un servicio de taxi autónomo a prueba.

"¿Quieres hacer el recorrido?"

Didi vio la oportunidad de adelantarse en la propia desgracia protagonizada por Uber, en ese dramático suceso que le causó la muerte a una mujer; y por ello reimpulsó su proyecto. El verano pasado puso en marcha en Shanghai, una ciudad con 24,5 millones de habitantes, una iniciativa piloto de vehículos autónomos y anunció su idea de extenderlos por toda China y llegar a Japón y a América Latina a medio plazo, si todo iba bien.

La compañía ya estaba presente en la enorme ciudad asiática con sus vehículos con conductor, así que la empresa decidió ofertar a través de la app la participación de sus clientes en la nueva iniciativa. "¿Quieres hacer el recorrido en un vehículo autónomo? Si aceptas, el viaje será gratis". Con este mensaje, comenzó a reclutar candidatos para desplazarse por Shanghai en coches sin conductor, aunque con un operario a bordo para comprobar el correcto funcionamiento. También había uno en el ensayo de Uber en Colorado, pero éste no estuvo atento para pasar de modo automático a manual y evitar el apropello y muerte de Elaine Herzberg.

Varios de los coches sin conductor que Didi tiene a prueba en Shanghai y dos ciudades más / DIDI

Varios de los coches sin conductor que Didi tiene a prueba en Shanghai y dos ciudades más / DIDI

Nivel de autonomía 4

La oferta de Didi a finales de agosto era válida solo durante un único día en trayectos por el distrito de Jiading. Pero tras ese día de prueba hubo otro, y otro, y otro más; hasta el punto de que la compañía asiática ha perfeccionado su propuesta de coche autónomo y ya dispone de una flota de 30 unidades con un nivel de autonomía 4. Existen cinco niveles y el 4 hace referencia a "automatización alta": el coche es capaz de circular solo y toma decisiones al margen del conductor gracias a sus sensores y cámaras.

El nivel más avanzado, el 5, se refiere a una "conducción autónoma plena", donde un conductor ni siquiera podría tomar el control, puesto que no sería necesario ni el volante ni los pedales ni el propio conductor, que dejaría su hueco a un pasajero más. Los coches de nivel 4 son una realidad, mientras que los del 5 se espera su implementación antes de 2030, pero primero deberán perfeccionase por completo los del estrato anterior.

También por app

En el caso de Didi, Zhang Bo, cofundador y encargado de Tecnología de la compañía, asegura que la firma está a la espera únicamente "de que estén listas las licencias para que los coches autónomos puedan trasladar pasajeros", aunque ya disponen de una provisional y realizan desplazamientos aún como banco de pruebas. Al Gobierno de la ciudad autónoma "le gusta el proyecto y hasta ahora todo han sido facilidades".

Si el coche funciona, que obviamente es la cuestión básica, desplazarse en vehículo sin conductor será tan fácil como pedir con el móvil un taxi o similar con piloto. Basta con acceder a la aplicación, elegir el itinerario deseado, marcar la opción de coche autónomo y esperar a que el vehículo llegue al lugar señalado utilizando el GPS. Hasta ahí no hay mucha diferencia con solicitar un automóvil con conductor. Lo novedoso será entrar a un coche sin piloto y desde ese escenario tan frío confirmar el itinerario en una pantalla táctil en el interior, aunque en las pruebas hasta ahora siempre ha habido un operario para comprobar el buen funcionamiento.

Uno de los prototipos autónomos de Didi previos a la adaptación de los Lincoln estadounidenses / DIDI

Uno de los prototipos autónomos de Didi previos a la adaptación de los Lincoln estadounidenses / DIDI

Coches estadounidenses

Así se inicia la marcha de manera automática y el coche va mostrando en la pantalla el recorrido y los obstáculos a sortear, por supuesto siempre dentro de los límites legales de velocidad y seguridad. Por ejemplo, el coche no se pondrá en marcha si los ocupantes no llevan el cinturón de seguridad puesto, así que que nadie piense que los desplazamientos pueden convertirse en fiestas improvisadas, por ejemplo, porque el coche lo tiene todo controlado, o al menos así debería ser.

Lo curioso, además, es que la treintena de vehículos autónomos de los que ya dispone Didi son de la marca estadounidense Lincoln, a los que se les ha incorporado un sistema denominado Lidar, que se compone de sensores y cámaras incluso en el techo del vehículo, para registrar y evitar cualquier contratiempo. Los vehículos llevan un mamotreto en el techo que los delata a cientos de metros. "Son modelos híbridos y es nuestro sistema el que ofrece tanto taxis convencionales como autónomos", matiza Bo.

20 metros a la redonda

Además de esquivar obstáculos, el coche es capaz igualmente de reconocer y respetar las señales de tráfico, realiza todas las maniobras con suavidad y frenar de manera progresiva. Solo si las condiciones del viaje lo demandan, se acelerarán las funciones del coche. Por ejemplo, si alguien se le cruzara por sorpresa, el auto se detendría bruscamente: "A diferencia del ojo humano, Lidar reconoce todo lo que se encuentra a 20 metros a la redonda".

En todo caso, Didi prevé que sus coches sigan contando con un operario que refuerce la seguridad y que pueda pasar el coche a modo manual si surge algún problema, aunque en principio no tocará el sistema autónomo del coche salvo contratiempo. La firma china pretende seguir potenciando el transporte público al tiempo que se convierte en el referente mundial de una iniciativa en la que Uber apuntaba a ser pionera de no haberse visto involucrado uno de sus coches en un accidente mortal.

Un cliente espera para probar el servicio de taxi sin piloto de Didi / DIDI

Un cliente espera para probar el servicio de taxi sin piloto de Didi / DIDI

Un logaritmo al margen de lo humano

Ese es el gran escollo que deben sortear estos coches, su capacidad de respuesta ante "cuestiones ilógicas" que puedan surgirle. Los automóviles funcionan mediante un logaritmo al margen de los seres humanos, y la conducción a veces plantea situaciones insólitas. Por ejemplo, ¿qué haría un coche ante una zona de obras con desvíos provisionales mal señalizados? "Eso es algo que aún debemos asegurar al 100%, porque el problema no vendría por el diseño del coche, que está plenamente avanzado, sino por los imprevistos, pero seguimos trabajando en ello".

En Didi piensan que la incorporación plena de estos coches a las ciudades como una nueva realidad habitual de movilidad tardará en llegar "mucho tiempo", pero cifran que puede ocurrir en menos de cinco años "en zonas bien adaptadas para que puedan circular los coches sin problemas". Si todo sale según lo planeado este mismo año en la adaptación a las calles de Sanghái, y dos ciudades chinas más, la firma se encargará de impulsar su coche autónomo desde 2021 en Japón y Latinoamérica. Didi ya ha bautizado a estos coches con el nombre de Robotaxis, que se refiere a la robótica pero que sin duda crearía mofas en España, por aquello de incluir "robo".

Competencia pero poca

Al igual que en la Universidad Autónoma de Madrid se ha puesto en marcha desde este mes de febrero un servicio de autobús autónomo, que convierte al campus de Cantoblanco de la UAM en el primero de España en disponer de un vehículo así; en China otra empresa, Pony AI, ha tratado de competir con Uber y Didi impulsando un servicio de coches sin piloto que presta servicio en la Universidad de Guangzhou, aunque únicamente de 14.00 a 16.00 horas y solo con tres coches.

Pony AI, en todo caso, asegura que dispone de la tecnología necesaria para plantar cara a cualquier rival e incluso exportarla a medio plazo. En Didi, por su parte, afirman que su apuesta no es por un coche autónomo, sino por instaurar un nuevo modelo de movilidad que además "evitará los atascos" porque "la gente dejará de comprar coches y se desplazará en otros modelos de transporte público". En todos los casos es determinante la inteligencia artificial. Lo que hay que sortear es que ésta no choque con la humana, que al volante no siempre es muy lógica.