Suspende pagos la empresa de cátering escolar Comer Bien
Su dueña es la firma del mismo sector Arcasa, que también se encuentra en insolvencia desde agosto de 2023
20 marzo, 2024 00:00La compañía Comer Bien, conocida por su marca Combi Cátering, ha entrado en concurso de acreedores que se tramita en el Juzgado Mercantil número 1 de Barcelona. Éste ya ha decretado el fallido y ha acordado nombrar administrador concursal al despacho Crowe. Es de temer que el expediente derive en liquidación.
Actividades
Comer Bien disponía de dos líneas de negocio, a saber, cátering para actos sociales y restauración colectiva. En este último campo trabaja para residencias de ancianos, empresas y sobre todo centros educativos. Entre otros, tenía a su cargo los comedores de 42 guarderías públicas de Barcelona, 41 escuelas en Cantabria y 60 en Aragón.
Desplome
Debido a sus agudos problemas de tesorería, a comienzos de año comunicó a las autoridades competentes la imposibilidad de seguir prestando el servicio. Por ello, se cancelaron los contratos y los afectados encargaron el suministro a otras empresas del sector que ya venían colaborando en otros colegios. Así pues, Comer Bien ha quedado paralizada, el grueso de los contratos están finiquitados y sus 300 empleados penden de un hilo.
Bancarrota de la matriz
El 100% del capital pertenece a Cátering Arcasa. Este medio informó en agosto de que dicha entidad había presentado concurso de acreedores.
Comer Bien tiene la sede social en Zaragoza, en el inmueble que ilustra la información. Ha promovido el expediente concursal ante los tribunales de Barcelona, porque en esta plaza radicaba hasta ahora su principal centro de intereses económicos.
A raíz de los problemas reseñados, cesaron los administradores Ignacio Miras Massaguer y David Rovira Ferrer. Fueron sustituidos por la propia Catering Arcasa, en calidad de administradora única.
Quiebra la constructora gerundense Espígol Ferrer
Construccions i Restauracions Espígol Ferrer, de Banyoles, ha entrado en concurso de acreedores y liquidación. Tramita el expediente el Juzgado Mercantil número 1 de Girona, que sin más preámbulos ha ordenado la disolución de la sociedad.
En consecuencia, se suspenden las facultades de gestión y disposición del patrimonio. Por último, se da el cese al gerente Esteve Ferrer Llobet, que ha sido sustituido por el administrador concursal.
Espígol Ferrer lleva varias décadas en el sector del ladrillo. Además de obra nueva, en particular viviendas, casas unifamiliares y naves industriales, abordaba de lleno las restauraciones y rehabilitaciones, así como la obra pública.
El negocio lo fundó Silvia Durán Corominas, quien cedió el testigo de la administración en 2016 a Esteve Ferrer.
La sede social se encuentra en la calle Roques nº 22, de Banyoles.