Los aceites industriales Brugarolas, inmunes a la crisis
La empresa catalana, fundada en 1885, aumenta sus ventas y beneficios durante el Covid
26 noviembre, 2021 00:00La compañía Brugarolas SA, de Rubí (Barcelona), fabricante de lubrificantes y aceites para procesos industriales, destaca en su memoria anual el “impacto” de la pandemia del coronavirus sobre la economía global, que afectó a “la producción, a la cadena de suministros y a la estabilidad financiera de las empresas, a la vez que redujo el consumo y la inversión”.
Pero en su caso particular, la situación pandémica careció de tintes poco preocupantes. La entidad familiar no se vio forzada a suspender la producción durante los meses más duros del confinamiento, aunque éste sí afectó a la red comercial.
ERTE parcial
Los planes de urgencia puestos en marcha se enfocaron a asegurar la continuidad de la fábrica de Rubí y lograr que su evolución se aproximara lo más posible a una cierta normalidad.
En mayo, Brugarolas presentó un expediente de regulación, consistente en reducir la jornada de trabajo en un máximo del 50%. Por último, a fin de asegurar la liquidez, suscribió varios préstamos ICO por importe de 8,3 millones.
Ventas internacionales
Brugarolas tiene su sede central e instalaciones en Rubí, valoradas en libros en 25 millones. Su grupo incluye media docena de filiales comerciales, sitas en Alemania, Francia, Italia, China e India. Entre la matriz y sus hijuelas emplean a 180 colaboradores.
A pesar de las circunstancias prevalentes, las magnitudes económicas de Brugarolas no experimentaron mermas, sino todo lo contrario. Las ventas consolidadas subieron a 63,1 millones, medio millón más. La cuarta parte procede de la exportación, destinada a sesenta países.
Ganancias y fondos propios
El beneficio de explotación y el neto después de impuestos alcanzaron 2,9 y 1,9 millones, con alzas respectivas del 61% y el 58%. La empresa mantuvo el dividendo en la módica cifra de 45.000 euros.
El patrimonio de Brugarolas suma 25 millones y las deudas, 37 millones, incluyendo las facilidades del ICO.
Constitución en el siglo XIX
La planta fabril de Rubí dispone de capacidad para fabricar 50.000 toneladas anuales. Produce grasas y aceites para usos industriales, anticorrosivos, desengrasantes, engrasadores y aerosoles, con un surtido de 3.000 referencias.
Los orígenes de la casa son muy antiguos. Se remontan a 1885, cuando el emprendedor Miguel Brugarolas Bofill fundó el negocio con un capital social de mil pesetas y abrió oficina en la Ronda de San Pedro de Barcelona. Hoy las riendas las empuña la cuarta generación, encarnada en los hermanos María Victoria, María del Mar, Eduardo, Luis Alberto e Ignasi Brugarolas Sellés.