El concesionario Motorcat suspende pagos y acaba en liquidación

Las cifras agregadas de las dos compañías arrojan un activo de 13 millones y unas deudas de 10 millones. El binomio facturaba 18 millones anuales, con medio centenar de trabajadores en plantilla.

Sedes en Berga y Manresa

Pedret tiene su domicilio societario en Berga, mientras que Motorcat radica en Manresa. Esta última empresa es la que explota el concesionario de vehículos de ocasión de la marca Opel, sito en la calle Sant Cristòfol, de la capital del Bages. Motorcat ha pedido al juzgado la liquidación de sus bienes patrimoniales.

Las instalaciones de Manresa albergan un amplio catálogo de coches de segunda mano. Además de todos los servicios de postventa como taller mecánico, eléctrico, de chapa y pintura. Las dos entidades tienen de administrador único a Jordi Macià Rosell Ibars.

Garatge Montserrat

Automòbils Pedret posee el 50% del capital de Motorcat. El otro 50% está en manos de Garatge Montserrat, de Igualada. La lideran Jorge y José María Basols Borrás.

Garatge Montserrat instó quiebra a principios de 2021 ante el Mercantil 5 de Barcelona. En abril último, dicho juzgado dictó el archivo y la extinción de la sociedad.

Fiambres Morte SA 

Otra empresa catalana que acaba sus días en quiebra es la veterana Morte SA, de Sabadell, hoy en manos de la tercera generación de los fundadores. Desde hace más de 80 años se dedica a la producción de charcutería de alta gama. El surtido comprende embutidos, especialidades españolas y alemanas, cocidos, fuagrás y otros cocinados.

Morte estaba dotada de un capital de 546.000 euros y llegó a acumular unas reservas de 7,7 millones. Pero los resultados han sido muy deficitarios desde hace muchos años, hasta el punto de que acumuló unas fortísimas pérdidas de 15 millones. La casa tiene 22 personas.

Morte se fundó en 1939 en Cerdanyola del Vallès. En 1981 inauguró sus instalaciones de Sabadell. Está dirigida por José Morte Valls.

Además de la petición de concurso voluntario, Morte ha solicitado la liquidación.

Más pinchazos

Al margen de estos descalabros, los juzgados mercantiles de Barcelona han decretado otros tres fiascos empresariales.

Uno es el de Crowley Carbon Spain, de Barcelona. Se trata de una firma de ingeniería especializada en el logro de emisiones cero de carbono para sus empresas clientes. El administrador es Norman Vicent Crowley. La entidad es filial de la sociedad irlandesa Crowley Carbon.  

El segundo tropiezo es el de JPG Retolació, de Sant Joan Despí. Se dedica a la impresión digital, rotulación, diseño gráfico e industrial y elaboración de expositores. Enrique Sánchez Vega ejerce de administrador único.

Por último, entró en fallido el comercio Elegant Nails, de Barcelona, titular de un centro de estética sito en la calle Cases Boada.