La constructora sevillana Vimac entra en insolvencia
El parón de la obra pública empieza a pasar factura a las empresas del sector, baqueteado como pocos durante la crisis. La última empresa damnificada es Vimac, veterana constructora del municipio de La Rinconada (Sevilla) que ha instado concurso de acreedores ante el juzgado mercantil número 1 de Sevilla. Éste ya ha designado administrador concursal a Landwell Pricewaterhouse Coopers.
Vimac se constituyó en 1967, por lo que el próximo año celebrará su primer medio siglo de existencia. Sus actividades abarcan obras para los sectores de las instalaciones, telecomunicaciones, hidráulico y ferrocarril. En los últimos tiempos, Vimac se ha proyectado con fuerza al sector ferroviario y las centrales eléctricas.
Muchas de sus actuaciones las ha realizado de la mano de otras empresas del ramo, mediante la creación de uniones temporales. En conjunto, la firma participa en una treintena de asociaciones de dicha naturaleza.
Los problemas financieros de Vimac afloraron a comienzos de año. La dirección de la casa negoció con la banca acreedora y logró un acuerdo de refinanciación. Pero poco después desistió y promovió un preconcurso de acreedores, la antesala de la suspensión de pagos formal.
Vimac cuenta con una plantilla de 160 trabajadores. Tiene un activo de 50 millones euros, frente a un pasivo exigible de 40, de los que un tercio corresponden a deudas bancarias. La compañía factura poco más de 30 millones anuales, contra los 45 que giraba en 2011. El accionista mayoritario y administrador único de la sociedad es Guillermo Contreras Ramos.