El fabricante de Mapisa y Venus Cerámica suspende pagos
El juzgado mercantil número 1 de Castellón ha declarado en situación de concurso de acreedores a la empresa Hatz Spain. Dicha entidad posee una gran fábrica de pavimento cerámico de alta calidad en el municipio castellonense de Nules, con una plantilla de 240 empleados. Sus marcas comerciales son Mapisa y Venus Cerámica.
La firma cuenta con un activo de 75 millones de euros y arrastra deudas bancarias de 34 millones. Antes del verano, la dirección de Hatz pidió al juzgado que homologase un acuerdo de refinanciación con las entidades. Pero poco después, instó el preconcurso de acreedores.
De forma paralela a tales iniciativas, hace pocos meses inició negociaciones con Grupo Halcón para venderle la planta de Nules, pero no recayó acuerdo. Halcón sostiene que hacen falta medidas de ajuste en la fábrica porque no alcanza los índices de productividad necesarios.
Venus Cerámica fue fundada por la familia Llop a finales de la década de 1980. En 2002, el grupo griego Hatz pactó con la propiedad y adquirió la empresa y otros negocios relacionados. A la sazón, Venus facturaba 20 millones anuales.
Casi tres lustros después de aquella compra, Venus ingresa 50 millones, pero sus cuentas están lastradas por fuertes pérdidas. En el mismo periodo, el pasivo exigible ha crecido un 70%.