Martín Ferrer, Amnesia Ibiza y fotografía del logo
El amargo verano de Martín Ferrer, el catalán dueño de Amnesia Ibiza
La icónica discoteca languidece a la sombra de Unvrs de los Matutes
La Audiencia de Barcelona confirma su imputación en el 'caso Marina Besòs'
Más información: Los Matutes noquean a la catalana Amnesia Ibiza
Ibiza no es isla de fiesta para todos. Uno de sus habituales, el empresario catalán Martín Ferrer, vive un amargo verano en la isla pitiusa por dos motivos: su querida Amnesia Ibiza, icónico club abierto en 1974, languidece a la sombra de la nueva discoteca Unvrs de la familia Matutes. Y, además, sus asuntos judiciales han sufrido un revés en Barcelona.
Lo detallan fuentes cercanas al empresario sitgetà después de que la sección octava de la Audiencia Provincial de Barcelona rechazara hace unos días un incidente de nulidad presentado por una empresa de Ferrer contra el llamado caso Marina Besòs.
Con ello, el que fue el rey de la noche española, creador de Amnesia y Cova Santa, sigue investigado en los procedimientos que analizan la reconversión de las piscinas de Sant Adrià de Besòs (Barcelona) en una discoteca... de la marca Amnesia.
"No ha lugar"
¿Qué pedía Ferrer? El empresario alegó quebranto de la tutela judicial efectiva para tumbar la causa penal por, entre otras razones, la "desidia" de sus antiguos abogados.
El fundador de Amnesia asegura que no goza de un proceso con "las debidas garantías" por el mal trabajo de su equipo legal anterior y las decisiones contradictorias tomadas en el marco de esa causa.
Pero los magistrados de la Audiencia Provincial no dan por buenos los argumentos, y rechazan su exposición.
Imagen de Amnesia Ibiza y Unvrs, el logo del nuevo club de los Matutes
Sigue investigado
Asi las cosas, Ferrer sigue investigado en la causa Marina Besòs, que suma ya más de una década de instrucción. También lo están el exalcalde de Sant Adrià, Jesús Canga, e incluso el actual gerente del Institut Català del Sol (Incasòl), Jaume Vendrell, antes presidente del Consell Comarcal del Barcelonès (CCB).
En este caso, el juzgado de Instrucción número 2 de Badalona quiere saber si hay motivos para pensar que se hizo un presunto traje a medida al dueño de Amnesia para que inaugurara en 2013. La discoteca tuvo una corta vida, pero ha estado rodeada de polémica por si su permiso pudo ser ilegal.
Un club que no existió y un impago de medio millón
Amnesia Sant Adrià dejó un impagado al erario público de 500.000 euros, como explicó este medio. Fue el segundo gran desaire del empresario a los poderes públicos.
El primero había tenido lugar años antes, cuando Martín Ferrer proyectó otra gran Amnesia --la mayor del mundo-- en el Port Fòrum de Sant Adrià. Convenció a Paris Hilton y al expresident Jordi Pujol de la bondad de su idea.
De nuevo, esa iniciativa tampoco cuajó. Su derecho comercial terminó en manos de Solvia, luego Cerberus y luego, enmarañada en una guerra con un empresario particular: Guillermo Moreno.
"No sé nada"
A preguntas de este medio, Ferrer se ha desvinculado de la resolución judicial. Ha asegurado que "tuvo participación en la empresa, pero hace muchos años". Ahora no sabe quién la opera.
Otras fuentes cercanas al caso aseguran que el patrono jamás figuró en la firma, llamada Innovaciones Calem, "porque en la misma operan testaferros de Ferrer como administradores".
Otros medios, como La Vanguardia o Diari de Sant Adrià, también vincularon directamente al dueño de Amnesia con Calem.
Imagen del interior de Amnesia Ibiza
"Hace daño"
En cualquier caso, la causa en la que está enmarañado Martin Ferrer sigue. Y coge al empresario en un momento preocupante, cuando su mascarón de proa, Amnesia Ibiza, sufre por la feroz competencia de la nueva macrodiscoteca de la familia Matutes en la isla pitiusa: Unvrs.
Como explicó este medio, el macroclub ha arrebatado a Ferrer algunas de las residencias más granadas que tenía Amnesia, como elRow o la de Carl Cox.
¿Qué dice Ferrer de Unvrs? En charla telefónica con este medio, admite que su nuevo y poderoso competidor "hace daño". Eso sí, su grupo sigue operando a medio gas gracias al empuje de su otro club balear: Cova Santa.
Conflicto de seguridad
Éxito o fracaso aparte, es la primera gran temporada de verano en Amnesia Ibiza después del intento de asalto que protagonizó una fracción desgajada de los Casuals, los temidos hooligans del FC Barcelona, explicó Crónica Global.
Pasó el verano pasado, y terminó con la intercesión de boxeadores de la Ciudad Condal, que acudieron a Ibiza a negociar con los ultras y a desplazarlos de la sala. Ya no están.
Ya más recientemente, esta temporada, estalló un conflicto interno en el club con una denuncia de presunta mala praxis laboral a la Inspección de Trabajo. El negocio ha negado las acusaciones.
