La CNMC complica la fusión de BBVA y Banco Sabadell al extender su análisis a la Fase 2
La decisión del organismo de Competencia complica la operación, articulada a través de una OPA hostil, y hace saltar por los aires el calendario previsto por el oferente
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Primer revés serio para BBVA en su intento por hacerse con el control de Banco Sabadell. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha decidido este martes darse más tiempo para analizar la eventual fusión de ambas entidades y ha extendido el expediente a la Fase 2.
El organismo que preside Cani Fernández ha argumentado su decisión en la "afectación potencial al mantenimiento de la competencia efectiva".
En esta segunda fase, tanto Banco Sabadell como "otros terceros con interés legítimo" podrán realizar las correspondientes alegaciones al proceso. Del mismo modo podrá actuar BBVA, que también estará legitimado para aportar más información sobre la operación, en su calidad de notificante de la misma.
Además, la CNMC solicitará un informe a las Comunidades Autónomas en las que la concentración derivada de una eventual fusión tuviera una mayor incidencia.
La medida adoptada por la Sala de Competencia del organismo regulador choca con la opinión que ha manifestado BBVA desde el inicio del proceso, basada en que la operación que notificó a finales de mayo debería ser aprobada en Fase 1.
La entidad que preside Carlos Torres ha sostenido que los indicadores de concentración que resultan de una futura fusión no superan en ningún caso los límites establecidos por la Unión Europea en esta materia.
Complejidad y afectados
En diversas comparecencias antes ante inversores, analistas y medios de comunicación, BBVA se ha remitido, a modo de ejemplo, a operaciones anteriores en el sector, especialmente la fusión entre Caixabank y Bankia, que fue aprobada en primera instancia.
Por el contrario, Banco Sabadell se ha manifestado favorable a que el análisis de la operación por parte del regulador pase a la segunda fase. Como argumentos, la entidad que preside Josep Oliu ha mencionado la complejidad de la fusión así como el elevado número de actores afectados que han manifestado su deseo de que su opinión sea tenida en cuenta.
Fuentes de esta entidad han mostrado "su respeto por el trabajo del supervisor", además de afirmar que la postura adoptada por la CNMC confirma "la complejidad de la OPA hostil lanzada por BBVA, que hace necesario un estudio más profundo de las consecuencias que tendría esta operación en la competencia del sistema financiero español".
Por su parte, BBVA ha mostrado su disposición a seguir "colaborando estrechamente con la CNMC para culminar cuanto antes el acuerdo de compromisos y la aprobación del expediente".