El "súper año electoral" pasa factura a los mercados
La incertidumbre geopolítica por los numerosos comicios previstos para 2024 comienza a plasmarse en las bolsas, que se asoman a un más que incierto segundo semestre
2 julio, 2024 00:00Noticias relacionadas
- Cellnex, Fluidra y Colonial, las víctimas de la lucha del BCE contra la inflación
- Europastry frena su salida a bolsa por la incertidumbre y elevada volatilidad del mercado
- El fabricante de las zapatillas de culto Golden Goose pospone su OPV por la repentina volatilidad de los mercados
- Deuda, refinanciación y BCE: el cóctel explosivo que vuelve a hundir a Grífols
Poco a poco se confirman los augurios expresados por los expertos a comienzos de año en torno al más que posible impacto de las muy numerosas citas electorales previstas para este año, algunas en zonas económicas tan influyentes como la Unión Europea y EEUU. Las turbulencias provocadas por los comicios al Parlamento Europeo y su derivada en forma de adelanto electoral en Francia se han visto reflejadas en el errático comportamiento de los índices bursátiles en el último mes.
La particular agenda política de 2024 incluía más de 80 citas electorales a lo largo y ancho del planeta y aunque el arranque del año fue prometedor, alentado por resultados empresariales mejores de lo previsto y unos datos de crecimiento económico algo por encima de lo esperado, el clima geopolítico se ha encargado de extender algunos nubarrones que abren la puerta a una segunda mitad del año más que incierta.
La tensión en Francia
Si bien los resultados globales de las elecciones europeas no arrojaron grandes sorpresas, sí evidenciaron el agotamiento de los bloques tradicionales y el consiguiente avance de las opciones a ambos extremos, con la citada derivada en Francia.
La celebración de elecciones anticipadas y la elevada polarización en el país galo han disparado la prima de riesgo casi 20 puntos básicos, hasta el punto de situarse por encima de la de Portugal, y la caída de más del 5% del principal índice de la Bolsa de París, el CAC-40, en apenas cuatro semanas, con el sector financiero como principal perjudicado.
Un clima que se ha trasladado al resto de los principales mercados europeos aunque, a diferencia del francés, aún mantienen parte de la revalorización acumulada en el primer tercio del ejercicio.
Otro factor que contribuye a las turbulencias es el relacionado con la política monetaria y el comportamiento de la inflación. A comienzos de año, el debate consistía en si sería el Banco Central Europeo (BCE) o la Reserva Federal el más activo a la hora de reducir los tipos de interés y en qué medida lo haría cada uno.
Lo cierto es que la inflación ha dejado de mostrar cifras inéditas en 40 años; tan cierto como parece haber llegado para quedarse y para hacerlo aún lejos de los objetivos de los bancos centrales, lo que los ha dejado en tierra de nadie.
Un escenario que ha hecho más compleja la toma de decisiones a la hora de confeccionar carteras, sin tener tan claro como al principio la intensidad con la que se va a ajustar el precio oficial del dinero.
Planes aplazados
Así las cosas, algunos planes para salir a bolsa empiezan a aplazarse, a la espera de mejores oportunidades, una clara señal de que los inversores no ven un panorama despejado para los próximos meses.
En España, Europastry ha optado por tomárselo con más calma cuando ya había anunciado públicamente que el proceso estaba muy avanzado. Mientras, grupos con Tendam y Cirsa, que preveían su estreno en el parqué durante este año, se mantienen a la expectativa.
En el plano internacional, el fabricante de calzados singulares Golden Goose también ha echado el freno a una de las OPV más llamativas del año. Prácticamente ninguna ha descartado la operación; comenzar a cotizar no desaparece de las agendas, pero todos parecen coincidir en que los próximos meses no serán el mejor de los escenarios temporales.
Cabe recordar que en el horizonte aparecen las elecciones estadounidenses, que podrían suponer la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca. El debate electoral de la pasada semana encendió todas las alarmas entre los miembros del Partido Demócrata por el errático desenvolvimiento del actual presidente y candidato a la reelección, Joe Biden, hasta el punto de que cada vez surgen más voces que claman por que deje su lugar como candidato a alguien más apropiado.
Nuevas dudas por si fueran pocas las ya existentes. Conforme avanza el año, se confirma que la confluencia de calendarios electorales no era una buena noticia para los mercados.