Félix Revuelta (Naturhouse): "Imponer el catalán evita que el talento venga a Cataluña"
El presidente de la conocida firma de dietética critica al Gobierno por "gobernar a golpe de genialidad" y lamenta la escasa fuerza de la sociedad civil: "Las empresas importantes dependen mucho de los políticos"
11 febrero, 2024 00:20Noticias relacionadas
No podrá decirse que el presidente de Naturhouse no hable claro. Félix Revuelta es uno de los pocos empresarios que eleva la voz para pronunciarse sobre los avatares políticos del país, sea el proceso independentista o la política económica del Gobierno. En esta entrevista con Crónica Global, el fundador de la conocida firma de dietética se moja sobre varios asuntos de actualidad y alerta sobre la excesiva vinculación del sector privado con la Administración: "Las empresas importantes dependen mucho de los políticos".
--Pregunta: ¿Qué perspectivas económicas tiene para este año?
--Respuesta: Lo veo estable aunque quizá con un crecimiento cero porque la situación internacional es complicada. Tenemos un montón de guerras. Sí habrá algunas especialidades que funcionarán bien, como el armamento, que va a funcionar de maravilla. El resto lo tendrá complicado y además si se tienen intereses en esos países bajarán las ventas. Y Europa ya ves cómo está.
--En junio se celebrarán elecciones europeas y parece que después de los comicios regresará la ortodoxia fiscal. ¿Cómo repercutirá esta decisión en España?
--Lo que pasa es que este Gobierno, como es tan loco, no sabes lo que hará el día siguiente, cada día nos viene con una novedad. La verdad es que la seguridad jurídica de España está cada día más débil. No se puede gobernar a golpe de decreto y de genialidad. Ahora la ministra de Trabajo dice que los jugadores de fútbol cuando sean padres tienen que descansar cuatro semanas. Imagina que le dicen a Vinicius que va a estar cuatro semanas sin jugar. ¡Le van a quitar el puesto! Son cosas tan anacrónicas... las hacen y no piensan en sus consecuencias
--Usted acostumbra a hablar claro, ¿pero falta valor entre los empresarios? ¿Qué le pasa a la sociedad civil?
--La sociedad civil en España es flojita. En estos momentos cada vez hay más empresas que dependen de lo público. En Cataluña es un desastre: prácticamente hay el doble de empresas públicas que en Madrid. Pero es que aquí en Madrid este Gobierno cada vez se quiere meter en más. Si cada vez el ente público tiene más dominio de las empresas privadas, de las empresas importantes, al final los empresarios dependen mucho de los políticos. Aquí la sociedad civil es muy distinta a la de Estados Unidos. Allí los que tienen poder son los empresarios, los lobis lo manejan todo. Ahora está todo el mundo preocupado en si va a presidir Biden, pero a nivel económico no hay ningún problema porque va a seguir funcionando igual. La economía siempre va a ser boyante porque la dirigen los empresarios, mientras que aquí la dirigen los políticos que no tienen ni idea de lo que es una empresa. Ese es el problema.
--¿Diría que Cataluña hoy es una región hostil a las inversiones? Recientemente se ha producido la fuga de la Fórmula 1.
--Ya no es que sea hostil, es que no da seguridad de ningún tipo. En este momento, Cataluña tiene para mí dos grandes defectos. La seguridad jurídica, porque tenemos unos políticos que piensan más en crear su propio huerto personal que en servir a los ciudadanos. Este es el primer problema. Y el segundo es que para mantener ese huerto han impuesto el idioma catalán de una forma que evita que el talento venga a Cataluña. Cuando en 1959 se creó el Estado de Singapur había indios, chinos, malayos e ingleses. Pero como con todos estos idiomas no se iba a ninguna parte, se impuso el inglés obligatorio porque se podía atraer talento. Se montaron los mejores hospitales de Asia, las mejores universidades... ¿Qué sucede en Cataluña? Yo quería traer a un ejecutivo y cuando vio el panorama me dijo que no venía. ¿Cómo vas a exigir a un inglés que viene con sus hijos, que va a estar aquí con la empresa seis o siete años que hable catalán, que no le va a servir para nada después si se va de Cataluña?
--Al contrario de los países de nuestro entorno, España no ha bajado impuestos para salir de la pandemia y ha disparado el gasto público.
--El gasto público se tiene que financiar de alguna forma y al final se financia a cuenta de los ciudadanos. El Gobierno no ahorra en nada, ya ves el gasto que tiene en asesores y amiguetes. Hay muchas empresas que han empezado a pensar en irse de España. Cuando me marché de Cataluña hubo alguno allí que me criticó diciendo: "Revuelta se va de Cataluña por los impuestos". Pero si lo hubiera hecho por impuestos me hubiera ido a Irlanda o Portugal que también tengo empresa. Yo he venido a Madrid por mercado, he cambiado siete millones del mercado catalán por siete millones del mercado de Madrid.
--¿Qué le parece que se proponga multar a las empresas que no quieren retornar su sede a Cataluña?
--Primero eso es una ilegalidad porque va en contra de la libre circulación de empresas. Es una de las muchas tonterías que dicen los políticos. A mí no me van a multar desde Cataluña, ¡es lo que faltaba!
--¿Y la propuesta de reducir la jornada laboral de la ministra Yolanda Díaz? Hay un argumento razonable: si se mejora la productividad, se puede producir lo mismo con menos horas. Pero debería depender en cualquier caso de cada empresa, ¿no?
--Es una barbaridad. La reducción del horario a las multinacionales les puede perjudicar un poquito, pero a quien va a perjudicar es al pequeño y mediano empresario que es el más débil, que las está pasando canutas y ya va justo. Así están cerrando las pequeñas y medianas empresas gracias a las ideas fantásticas que tiene la ministra. Son cosas que no tienen razón de ser. ¿Crees que a Telefónica le perjudica la reducción de jornada? Pero al señor que tiene un bar o un pequeño comercio sí lo daña. Quieren gobernar para el pueblo pero gobiernan para los más fuertes.