Un grupo de niños se lo pasan en grande con una de las actividades de los Campamentos de verano de Fundación"la Caixa"
La Fundación La Caixa encuentra una mina de 4.000 millones en el revisado plan de Caixabank
La ejecución del primer programa estratégico de la entidad resultante de la fusión entre el antiguo Caixabank y Bankia ha supuesto un elemento fundamental para asegurar el creciente presupuesto para una obra social inédita en Europa por su magnitud y alcance
3 febrero, 2024 00:00Noticias relacionadas
"Hemos acordado la fusión con el convencimiento de que es beneficiosa para todas las partes". Con estas -por aquel entonces- voluntariosas palabras, los actuales presidente y consejero delegado de Caixabank, José Ignacio Goirigolzarri y Gonzalo Gortázar, respectivamente, daban el pistoletazo de salida a una operación que probablemente ni ellos sospecharon que sería tan provechosa.
La primera señal favorable fue la celeridad a la hora de cerrar un acuerdo que suponía dar lugar al primer Banco de España, un gigante con más de 600.000 millones de activos bajo gestión. Con toda seguridad, la segunda fue el primer plan estratégico de la entidad resultante, uno de cuyos puntos más llamativos fue el objetivo de generar capital por valor de 9.000 millones de euros hasta 2024 con la vista puesta en los accionistas.
Diversas modalidades
En este punto entra en juego la Fundación Bancaria La Caixa, en cuanto a que es el mayor de ellos, con una participación que ha ido escalando a través de las recompras y posterior amortización de acciones hasta algo más del 32%. Y más cuando para afrontar el último año de vigencia del plan, el consejo de administración del banco ha determinado elevar este objetivo hasta 12.000 millones de euros.
De modo que de esta cantidad, unos 4.000 millones repercutirán en la Fundación; no será en su totalidad en efectivo, ya que también incluye una remuneración indirecta a través de reducir el capital con la amortización de los títulos recomprados con anterioridad e incrementar así el peso en el reparto accionarial sin necesidad de realizar inversiones adicionales.
Siete veces el presupuesto más alto
Aquella operación beneficiosa para todos lo ha sido especialmente para la Fundación, que bien puede decirse que ha encontrado en el banco resultante de la operación anunciada en septiembre de 2020 su particular mina de oro, valorada en 4.000 millones de euros.
Para hacerse una idea del significado de este montante en las dimensiones de la institución, basta señalar que equivale a cerca de siete veces el presupuesto de la Fundación para 2024, que además será el más elevado de su historia: nada menos que 600 millones de euros.
Isidro Fainé, presidente de la Fundación Bancaria La Caixa y Criteria
Es decir, que en poco más de tres años, el primer socio de Caixabank se habrá asegurado poder dar continuidad durante el doble de ese tiempo a su labor en pro de fomentar la igualdad de oportunidades, con el apoyo a los más desfavorecidos, para construir una sociedad más justa.
Para 2023, la Fundación Bancaria La Caixa también contó con un presupuesto inédito hasta la fecha por su magnitud. Con vistas al ejercicio que acaba de empezar, la entidad ha podido elevarlo a ritmo de doble dígito, cerca de un 12%. Toda una señal de que camina sobre seguro con la garantía de poder apoyarse en su principal socio en el sector financiero.
900 millones en seis meses
No en vano, la Fundación ingresará más de 900 millones de euros en concepto de dividendos de Caixabank con cargo únicamente a los resultados de 2023. Una parte ya la percibió el pasado mes de noviembre mientras que el resto lo hará en abril, previa aprobación por la junta de accionistas que el banco celebrará este mismo mes de febrero.
El hecho de que en un sólo ejercicio la Fundación reciba en dividendos de Caixabank el equivalente a 1,5 veces la cuantía del presupuesto anual más elevado de su historia da cuenta de la relevancia que supone tanto la ambición inicial del plan como la de la revisión que se ha acordado.
De sombras a muchas luces
Queda determinar de qué manera se articulará el cumplimiento de este nuevo objetivo, toda vez que la distancia que separa al banco de él es de unos 5.100 millones de euros. Una cifra que el propio consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, admitió que trasciende el próximo dividendo del banco y la anunciada nueva recompra de acciones, cuya cuantía aún está por determinar.
"Corresponderá al consejo tomar una decisión sobre las maneras y los instrumentos a emplear para poder conseguir la nueva meta", señaló en la presentación de resultados del banco ante los medios de comunicación.
En cualquier caso, un escenario más que favorable para el futuro de la Fundación, que pocos podrían haber aventurado cuando la crisis sobrevenida por la pandemia llevó al Banco Central Europeo (BCE) elevar las exigencias de liquidez a sus entidades reguladas que, entre otras cuestiones, motivó la suspensión temporal de los dividendos.
