El sector privado se reivindica en Barcelona ante los oídos sordos del ayuntamiento
El tejido productivo y la sociedad civil tienden la mano a la Administración para que la capital lidere la nueva economía
27 abril, 2023 00:00Barcelona no puede vivir de espaldas al sector privado. Los portavoces del tejido productivo y la sociedad civil invitados a la primera jornada del foro Desperta BCN! lanzaron un llamamiento a los gestores de la capital catalana para estrechar lazos entre instituciones y empresas en aras de mejorar las políticas públicas. Mejorar las políticas y, además, garantizar el progreso económico de sus vecinos.
Hay señales de alerta. El expresidente del Círculo de Economía y presidente de Meridia Capital, Javier Faus, señaló que la actividad barcelonesa se ha decantado en las últimas décadas hacia una "economía del visitante". Un nicho que ha sido rentable hasta ahora, pero que no asegura el "paso adelante" que debe dar el territorio. "Es evidente que hemos perdido PIB per cápita. En el caso catalán, eso se traduce claramente en pérdida de productividad", advirtió.
Barcelona, ensimismada
El aterrizaje en Madrid de las sedes de grandes corporaciones como Microsoft y Netflix y la competencia por el talento tecnológico también exigen estrechar lazos entre lo público y lo privado en Barcelona. En este contexto, el cofundador de Glovo Sacha Michaud fue claro: la capital catalana no puede llevar a gala ser una urbe "anti-tech".
En el mismo sentido, el presidente del RACC, Josep Mateu, lamentó la falta de escucha del consistorio a la hora de abordar la movilidad. “Personalmente, la interlocución es buena. Profesionalmente, muy escasa", dijo.
Una nueva economía
A juicio de ambos, resulta imprescindible que los gestores se alíen con los empresarios y las asociaciones que día a día auscultan el latido económico de la ciudad. Tanto para planear las regulaciones sobre el urbanismo o la política fiscal como para mimar los nichos más activos de la economía local.
Los retos son enormes: tecnificar las empresas, volver más sostenibles la industria, afrontar la falta de vivienda pública y revisar la movilidad metropolitana. Sin intercambiar puntos de vista, acercar posturas y fijar normas compartidas, Barcelona perderá el tren de la nueva economía.
Públicos y privados, de la mano
Esta visión también se comparte del otro lado de las bardas institucionales. El director general de Red.es, Albert Martínez Lacambra, ejemplificó el valor de la colaboración público-privada con el programa Kit Digital. Esta iniciativa para digitalizar las pymes, sufragada con fondos europeos, muestra que cuando lo privado y lo público se unen todas las partes salen ganando.
Los toques de atención de los ponentes no invisibilizaron los puntos fuertes de Barcelona. Una combinación equilibrada entre "trabajo duro y ambiente social", en palabras de Michaud, y unas redes de metro y bus bien dimensionadas, apuntó Mateu. "No estamos tan mal", resumió Faus. Solo falta que las instituciones tiendan la mano.