Clamor a favor de un debate realista sobre la seguridad y la okupación en Barcelona
Las jornadas 'Desperta BCN!' analizaron con expertos los problemas sociales que más preocupan a los barceloneses, como la delincuencia o la movilidad
27 abril, 2023 00:00Lo dicen las encuestas: la inseguridad y la okupación son dos de los problemas que más preocupan a los barceloneses. Pero abordar estas cuestiones de forma realista, sin demagogia ni populismos, es la única forma de garantizar la convivencia. De esa necesaria visión objetiva, que además debe ser integral, se habló en las sesiones de Desperta BCN! dedicadas a las políticas sociales.
Junto a los retos económicos que afronta Barcelona, temas como la movilidad, la delincuencia o la okupación fueron tratadas por los expertos de estas jornadas organizadas por Crónica Global, Metrópoli y El Español. Lo hicieron a través de debates desapasionados, pero contundentes. Sin eludir que, efectivamente, existe una percepción de inseguridad en la ciudad que, posiblemente, no se ajusta estrictamente a las cifras reales. Pero ningún alcalde o alcaldesa pueden eludirla. La delincuencia preocupa a los ciudadanos y debe ocupar a los gobiernos municipales.
Más recursos policiales, legales y judiciales
La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlon, y el teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, no obviaron esas quejas ciudadanas, pero exigieron más recursos policiales, legales y judiciales, así como huir de las visiones apocalípticas. Todo ello pasa, aseguraron en una de las mesas redondas, por abordar la seguridad desde una dimensión integral.
En ese sentido, el portavoz de Junts per Catalunya en el consistorio barcelonés, Jordi Martí, abogó por los grandes consensos, mientras que el abogado y exlíder municipal del PP Alberto Fernández se mostró especialmente crítico con una inseguridad que, avisó, ejerce un efecto llamada.
La proximidad de las elecciones municipales favorece que la delincuencia sea utilizada como arma arrojadiza entre los partidos. Evitarlo exige amplios acuerdos. La colaboración entre los ayuntamientos y el Gobierno español para aumentar los castigos a los multirreincidentes es un ejemplo de ese obligado trabajo conjunto entre instituciones. Y también entre cuerpos policiales.
¿La seguridad es de izquierdas o de derechas? Lograr una ciudad de orden, dijo el líder del PSC, Salvador Illa, en su discurso inaugural, es de "muy de izquierdas" porque afecta a un bien común que es el espacio público. De esta forma respondía a quienes creen que es la derecha la que presta más atención a estos asuntos. Arremetió Illa, como después hicieron los expertos, contra los discursos alarmistas, que degradan la convivencia y, además, erosionan la marca Barcelona.
Ocho reformas del Código Penal
Seguridad, civismo, limpieza, movilidad… Sin olvidar el aumento de las okupaciones en Barcelona, analizadas en Desperta BCN! por dos abogados, Emilio Zegrí y Alejandro Fuentes-Lojo. Ambos fueron muy críticos con la nueva ley de vivienda aprobada por el Gobierno español y que, avisan, dificulta los desalojos. También afearon al Ejecutivo socialista que, en este mandato, haya impulsado ocho reformas del Código Penal. Respecto a la gestión de Ada Colau, cuestionaron sus complicidades con colectivos que precisamente promueven o, cuando menos, justifican esas usurpaciones.
La movilidad tampoco es ajena a la gestión social de todo ayuntamiento. En estas sesiones también se abordaron los retos del transporte público, el urbanismo táctico que ha alterado la circulación en el centro de la ciudad y la sensación de hostilidad que sienten los peatones ante la proliferación de nuevos medios de transporte, como los patinetes y el aumento de las bicicletas. De ello habló el presidente del RACC, Josep Mateu, muy criticado por el equipo de Colau por responder a sus políticas con informes y datos reales. Porque también en este asunto, ha denunciado Mateu, hay un tamiz ideológico.
Que cada día se desplacen a Barcelona 300.000 personas da idea de la importancia de ofrecer soluciones sin demonizar el coche privado, pero dando alternativas que garanticen una movilidad sostenible, dijo Mateu.