Tipos y precios más altos, menor oferta… el consumidor pagará los nuevos impuestos de Sánchez
Bancos y energéticas repercutirán parte de la subida de impuestos que aplicará el Gobierno mientras que amoldarán su oferta y sus inversiones en el sistema
13 julio, 2022 00:00Los nuevos impuestos a la banca y las empresas energéticas anunciados este martes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tendrán un efecto inmediato en las compañías afectadas pero no tardará en trasladarse en una parte significativa a los consumidores que, en este caso, constituyen la práctica totalidad de la población que reside en España.
En el caso de las empresas de servicios financieros ya avisaron en su día, a la vista de anteriores amenazas de subidas fiscales que después no llegaron a concretarse, que “no les quedaría otro remedio” que repercutir parte de esta subida a sus clientes, ante el escaso margen que les dejaba el escenario continuado de tipos de interés negativos que se ha extendido durante los últimos años.
Cambio de política monetaria
La situación cambiará a partir de ahora, cuando los bancos centrales comienzan a elevar el precio oficial del dinero, con el fin de combatir la disparada inflación. Uno de los últimos en hacerlo será el Banco Central Europeo (BCE), aunque el efecto ya se puede apreciar en la evolución del euríbor, el referente de la mayoría de préstamos hipotecarios, que en apenas seis meses ha pasado del -0,5% a superar el 1% durante algunas jornadas del mes de junio.
No obstante, se espera una subida progresiva de los tipos en la zona euro y una progresiva repreciación de las hipotecas, un momento que será aprovechado por el Gobierno para compensar el más que probable aumento de los márgenes con la implantación de un nuevo impuesto.
Comisiones
Como ha sucedido en otras ocasiones, la respuesta más habitual de la banca consiste en buscar la particular compensación a través del encarecimiento del crédito, con una subida de los tipos con vistas a captar pasivo; o bien, a través de un incremento de las comisiones por servicios a los clientes.
En este último capítulo, la banca ha presumido en tiempos de pandemia de no incrementar el coste del servicio a los usuarios pese a la complicada situación vivida y al prolongado escenario de tipos negativos.
Impuestos frente a la subida de tipos
Tras un periodo de cierta tregua, la oportunidad para elevar estas comisiones parece propicia ante la medida fiscal que llega como consecuencia de una decisión de política monetaria que, en ningún caso, pretende corregir una disfunción relacionada con la actividad bancaria.
“Elevar los impuestos a la banca como respuesta a una subida de tipos por parte del banco central correspondiente no tiene sentido aparente; la decisión no procede de una voluntad de los bancos, sino de un cambio de política monetaria que pretende acabar con un periodo expansivo de más de una década y dar respuesta a una evolución de los precios sin parangón en las últimas cuatro décadas”, apuntan desde una gran consultora.
Las patronales responden
En este sentido, la Asociación Española de Banca (AEB), patronal del sector, ha señalado que la subida de los tipos de interés por parte del BCE no está relacionada con los resultados de la banca y que no tiene necesariamente que suponer el registro de beneficios extraordinarios, en contra de lo que ha asegurado Pedro Sánchez para justificar la medida.
El portavoz de la patronal, José Luis Martínez Campuzano, ha apuntado que el escenario que se plantea con el cambio de política monetaria tiene otras derivadas, como la posible reducción de la actividad económica.
Acceso al crédito
En definitiva, la subida de tipos supone el final del dinero prácticamente gratis y de los créditos con condiciones muy ventajosas. “Si los bancos van a empezar a cobrar más por los préstamos, sus márgenes subirán pero también se encontrarán con que algunos clientes que antes podían permitirse acceder al crédito no podrán hacerlo más adelante por el incremento del coste”, recuerda la primera fuente.
Tanto en el ámbito bancario, en entidades como AEB y CECA, como en el empresarial (CEOE y Cepyme) han lamentado que el Gobierno haya tomado la decisión por sorpresa, sin un debate previo y sin consultar a los afectados.
Resultados en España
Cabe recordar que el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, lanzó recientemente un mensaje al Gobierno con motivo de su intervención en la asamblea general de la patronal. “Cuidado con ordeñar la vaca en exceso”, expresó gráficamente en referencia a una posible subida de impuestos de la que se hablaba y que finalmente ha terminado por concretarse.
También cabe tener en cuenta que entidades financieras como Santander y BBVA tienen una destacada exposición a mercados internacionales, hasta el punto de que España no es la plaza que más beneficios aporta a la cuenta de resultados. En este caso, las cifras globales no se corresponden con el comportamiento del negocio en España, que ha sido menos destacado en los últimos años por la situación de tipos negativos en la zona euro.
El caso de las eléctricas
Un caso similar al de las empresas energéticas, como explicaba el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, en la última junta de accionistas de la compañía, cuando recordó que los resultados en España estaban condicionados por los elevados precios en el mercado mayorista, que también afronta la compañía cuando acude a adquirir electricidad para vender a sus clientes. “Esos resultados son ampliamente compensados por los obtenidos en otros mercados gracias a nuestra diversificación geográfica”.
En este caso, las subidas del coste de la energía no habían sido repercutidas a los clientes, de ahí el resultado negativo. Sin embargo, será más complicado que esto suceda ante un escenario de subida fiscal.