La recuperación de precios de activos dispara los beneficios de Merlin el 809%

Merlin Properties cerró 2021 con un beneficio neto de 512 millones de euros. Cifra que implica un crecimiento del 809% si se compara con el ejercicio anterior por la revalorización de sus activos inmobiliarios. El valor en libros se multiplica por siete hasta los 13.041 millones, 239 más que en 2020, y pasa página a la crisis del coronavirus que fue especialmente dura con los edificios de la socimi.

Las naves logísticas se han convertido en objeto de deseo, hecho que compensa la ligera reducción del valor de los centros comerciales. Las oficinas y sucursales bancarias se mantienen planas. Estas últimas están valoradas en 1.750 millones y Merlin ya ha activado su venta. BBVA tiene un derecho de adquisición preferente que aún no ha activado.

Clemente cobra siete millones

Si finalmente el banco presidido por Carlos Torres no mueve ficha, el consejero delegado de la socimi, Ismael Clemente, ya ha avanzado que las colocará a un tercero “tan pronto como sea posible”. El ejecutivo ha sido otro protagonista de la presentación de resultados. Obtuvo una remuneración total de siete millones, el 55% más que en 2020, entre la retribución variable a corto y largo plazo.

Ismael Clemente, consejero delegado de Merlin Properties / EP

Su sueldo está fijado en un millón de euros. A esta cantidad se le sumaron 900.000 euros de variable a corto --que no recibió en 2020-- y otros 4,6 millones de variable a largo. Este porcentaje es el 31% superior al de hace un año. Asimismo, percibió 375.000 euros por un incentivo extraordinario vinculado a las acciones de Merlin.

En cuanto al director general corporativo, Miguel Ollero, su remuneración total ha ascendido a los 6,5 millones.

Fin de las discrepancias en el consejo

Todo ello, en unos meses en que Clemente tuvo que limar asperezas con la propiedad de Merlin. Las discrepancias en el consejo de administración llevaron a que el ejecutivo estuviera al borde de la destitución al inicio del ejercicio. No por los resultados de su gestión, sino por una presunta falta de transparencia que se ha empleado en terminar.

Ahora, Clemente asegura que el equipo directivo se dedica a la “gestión diaria” y ha mostrado su optimismo en que la paz entre los accionistas de control de la socimi y los gestores “queda resuelta para siempre”.

Apetito del mercado

En cuando a la estrategia para 2022, Clemente señala que se debe aprovechar el “apetito muy fuerte” de los mercados. La venta de activos permitirá reducir el endeudamiento de Merlin, concluir su programa de desarrollo logístico, lanzar una recompra de acciones, repartir un dividendo extraordinario y acelerar su incursión en data centers, otra de las líneas de actividad que se quieren reforzar ya que se esperan rentabilidades al entorno del 11%.

Merlin Properties / EUROPA PRESS

En el plano operativo, las rentas brutas de 2021 ascendieron a 505 millones de euros, el 0,4% más. El resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 377 millones de euros, el 3,2% superior, y los ingresos menos los gastos (beneficio operativo), sin tener en cuenta el efecto de la revalorización de los activos, se situó en los 273 millones de euros (+ 4,1%).

De cara a 2022, prevé mejorar en un 10% su beneficio operativo, hasta los 300 millones de euros. Las desinversiones en cartera serán de unos 200 millones y no se prevé realizar ninguna compra significativa más allá de las oportunidades que puedan surgir.

Reparto de dividendos

Con los resultados de 2021 en la mano, Merlin apuesta por repartir un dividendo mínimo de 0,25 euros. Unidos a los 0,15 euros que ya ha distribuido, los accionistas recibirán 0,40 euros por cada título de la socimi. Clemente espera llegar a los 0,45 en el ejercicio en curso.