Vista panorámica de Barcelona. Sector inmobiliario / EP

Vista panorámica de Barcelona. Sector inmobiliario / EP

Business

El inmobiliario sufre por la inflación tras cerrar un año récord

La compra de vivienda se ha disparado un 35%, propulsada por unas hipotecas asequibles y una escalada de precios que se ha convertido en un arma de doble filo

21 enero, 2022 00:00

El mercado inmobiliario ha recibido en 2021 el estímulo de la inflación, combinada con un precio del dinero en mínimos. Una combinación favorable para el sector, ya que rebaja el coste de las hipotecas a la vez que incentiva la inversión en activos por la pérdida de valor del efectivo como consecuencia del incremento de precios.

Prueba de ello es que las operaciones de compraventa de vivienda se han disparado un 35% en 2021, según los datos publicados ayer por el INE. Con casi 50.000 transacciones firmadas, las cifras registradas en noviembre son las mejores en 15 años --en 2007 se superaron las 56.000--.

La amenaza de los precios

Sin embargo, la inflación que ha animado el mercado es a la vez uno de los grandes riesgos económicos de este 2022. La subida de precios --en particular de la luz--, los problemas logísticos y la escasez de materias primas --que se prevé que continúe este año-- encarecen la construcción de vivienda nueva.

La creciente inflación también plantea la amenaza de que los bancos centrales eleven el precio del dinero, lo cual sería un golpe para la recuperación económica y especialmente para sectores como el inmobiliario. En estos momentos, la previsión generalizada de los analistas económicos es que el Banco de Inglaterra sea el primero en actuar con un incremento de tipos de interés el próximo mes.

Subidas de tipos

Después del Reino Unido iría la Reserva Federal de Estados Unidos, que se espera que inicie una escalada de tipos en marzo que precedería a al menos otras dos subidas a lo largo del año. De confirmarse, estos movimientos incrementarían la presión sobre el Banco Central Europeo (BCE), del que se esperan posibles alzas en los próximos meses.

Aunque más evidentes en el mercado estadounidense, las presiones inflacionarias se notan cada vez más en el continente europeo. Holger Zschaepitz, editor económico del rotativo alemán Die Welt, alertó ayer de que el índice de precios al consumo (IPC) ha escalado hasta un 24% interanual en diciembre, la subida más alta en más de 70 años. Esta crisis monetaria coincide con las tensiones entre Alemania y Rusia --proveedor de la mitad del gas natural que consume la Unión Europea-- por el bloqueo alemán al nuevo gasoducto ruso en pleno despliegue de tropas de Moscú en la frontera ucraniana.

Poco margen para el BCE

En España, crecen las voces que advierten sobre el impacto de la inflación sobre los salarios y el poder adquisitivo de la población, y que llaman al BCE a tomar medidas. Un organismo que, por otro lado, se muestra cauteloso, ya que su inacción podría desatar una escalada de precios más acusada, pero cualquier decisión contundente pondría en peligro la recuperación tras una pandemia que continúa castigando tanto a la salud como a la economía.

“Si tenemos en cuenta las subidas de tipos de Estados Unidos, el euríbor subirá un poco”, augura Miquel Riera, responsable de hipotecas de la plataforma financiera Helpmycash, que pronostica un encarecimiento moderado de las hipotecas en 2022. Asimismo, apunta a las previsiones de alza en el euríbor del -0,502% al -0,3%, así como de un encarecimiento del 10% en el precio de la vivienda por la falta de oferta, el crecimiento de la demanda y unos costes más elevados.

Ralentización en 2022

El especialista destaca que “en 2021 se han dado las hipotecas más baratas de la historia, con un interés del 1,45% de media”, lo que ha llevado a un año récord que difícilmente será  superado en 2022, que se intuye como un ejercicio de crecimiento más moderado y estabilización. Observa además que “el mercado de hipotecas (+23%) no ha subido tanto como las hipotecas (+35%)”, ya que aunque ambos “son mercados que van muy relacionados, no todo el mundo que compra un piso o una casa necesita una hipoteca”, de modo que al estímulo hipotecario hay que añadir otros factores como la recuperación económica o la generación de ahorros durante los meses de menor actividad por la pandemia.

Entre las tendencias que se esperan en el mercado de cara a 2022, Riera también subraya el efecto que tendrán los Next Generation: “Uno de los motivos por los que se han dado tantos fondos europeos a España es para mejorar la eficiencia energética de las viviendas”. Como los proyectos no estarán financiados al 100%, considera previsible que las comunidades de vecinos implicadas contraten hipotecas a través de los bancos y “es probable que una parte sean hipotecas verdes con intereses más bajos”.