Alstom construirá los trenes lanzadera de Ferrocarrils al aeropuerto

La convocatoria presentada por FGC constaba de dos opciones. La primera por un coste de 167 millones de euros (202,07 millones con IVA) por la construcción y suministro, mientras la segunda llegaría hasta los 187 millones (226,27 millones con IVA) al incluir el mantenimiento durante 15 años de los trenes por parte del fabricante vencedor. Las fuentes consultadas por Crónica Global aseguran que Alstom se habría hecho con esta última, al contar con sus propios talleres para la revisión y rehabilitación de convoyes en Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona).

Alegaciones y aplazamiento

El contrato de licitación se encuentra por el momento en anuncio previo. No obstante, este medio ha podido saber que CAF y Stadler han impugnado la adjudicación, que todavía no se ha hecho pública. Fuentes del sector conocedoras de la convocatoria explican que la empresa fabricante de trenes originaria del País Vasco suele presentar alegaciones en prácticamente todos sus concursos, y que Stadler, con sede en Valencia, podría haberse sentido desplazada tras ganar anteriormente el concurso de la construcción y suministro de trenes de la línea entre Lleida y La Pobla de Segur.

Esto ha provocado que se haya aplazado el concurso público de FGC para los próximos seis meses. Es decir, hasta que se den respuestas a las alegaciones de CAF y Stadler --muy probablemente por algún detalle del fabricante ganador en las formas o la documentación presentada--, la adjudicación de los trenes para la lanzadera a la T1 queda paralizada, a la espera de que se repita la licitación, se anule o Alstom venza y empiece la construcción de los diez trenes con capacidad para 600 personas y de ancho ibérico.

FGC Mobilitat y la lanzadera del aeropuerto

Este lío en el que se ha inmerso la Generalitat a través de su operadora ferroviaria retrasará la puesta en marcha de la lanzadera a la espera que se decida qué empresa construirá, suministrará y mantendrá los nuevos trenes de FGC. No obstante, la incoherencia de la adjudicación de Adif de la lanzadera del aeropuerto de El Prat producirá un sobrecoste. Un sobrecoste que será sufragado por la inversión de la Administración catalana, y que Renfe Rodalies hubiera podido operar reubicando algunos de sus más de 250 trenes, e incluso los más de 100 convoyes de gran capacidad incluidos dentro del Plan de Rodalies 2020-2030, que llegarán a la red de Cercanías de Cataluña en los próximos años.

Pero además, como ya explicó este medio, Ferrocarrils ha creado una nueva empresa constituida en sociedad anónima, FGC Mobilitat SA y, por ende, fuera del perímetro del Sistema Europeo de Cuentas (SEC), que permitiría el endeudamiento propio. Esto supondría pasar a competir con el resto de operadores con una ventaja inicial y sin tener en cuenta el funcionamiento de Rodalies de Cataluña, que no se asemeja al que realiza FGC, y que sería incluir una nueva operadora en las líneas que actualmente gestiona Renfe.

Todo este lío por el tren al aeropuerto barcelonés queda ahora en suspenso, mientras el vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró, sigue anunciando nuevas adjudicaciones y licitaciones para comprar convoyes de ancho ibérico para desplazar a la operadora nacional, como en el caso de la R12 entre Lleida y L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona).