La entrada de CVC abre las puertas a una futura salida a bolsa de LaLiga
La inédita apertura del capital de la competición futbolística multiplica la posibilidad de llegada de nuevos socios que buscarán en el mercado la mejor manera de crear valor para su inversión
5 agosto, 2021 00:00Mucho se ha hablado sobre posibles salidas a bolsa de clubes españoles pero, paradójicamente, la que podría adelantarse a todos ellos es la sociedad que les agrupa y se encarga de organizar la competición más importante y gestionar los derechos televisivos: LaLiga.
El acuerdo planteado con el fondo de inversión CVC abre directamente la puerta de otra dimensión para un universo hasta ahora cerrado de forma hermética para todo aquel que no fuera un club miembro. La apertura del capital supone igualmente franquear las barreras hacia operaciones de compra y venta, la entrada de otros socios que, tradicionalmente, dirigen sus ojos al mercado bursátil cuando se trata de poner en valor sus inversiones.
Un complejo entramado
Desde el punto de vista societario, la operación se articula a través de una nueva sociedad a la que LaLiga traspasará sus principales activos: negocios, filiales y alianzas de diverso tipo. A lo largo de los últimos años, especialmente desde la llegada de Javier Tebas a la presidencia, la organización ha tejido un complejo entramado con decenas de instrumentales, líneas de negocio y activos.
En este punto, el negocio del fútbol profesional, que hace tiempo que llamó la atención de los inversores, necesita especialmente de ellos. Las consecuencias económicas de la pandemia han sido muy impactantes para una industria que, por lo demás, mueve miles de millones de euros al año.
Valoraciones
Es en esta nueva sociedad que pondrá en marcha LaLiga en la que prevé entrar CVC con la adquisición de un paquete minoritario, de apenas el 10%, lo que supone valorar el negocio de LaLiga en algo más de 24.000 millones de euros, según ha afirmado el organismo que agrupa a los 42 clubes del fútbol profesional en España.
Una cifra que no deja de llamar la atención si se contrasta con las que aparecen en las cuentas consolidadas de LaLiga. En el último ejercicio anterior a la pandemia (temporada 2018-2019), el resultado de explotación (Ebitda) del grupo fue de apenas tres millones de euros. El valor de sus activos se encuentra registrado por debajo de 2.000 millones, incluidos los derechos de retransmisiones.
Maximizar la inversión
Por todo ello, un inversor está dispuesto a pagar cerca de 15 veces más. Su intención es participar en el negocio pero, al mismo tiempo, poner en valor su apuesta particular.
Este tipo de vehículos no aterriza en los negocios con vocación de permanencia eterna. Desde el primer momento, su cometido es maximizar la inversión con la intención de que, en el momento de salir, la diferencia entre la inversión inicial y los ingresos derivados de la salida sea lo más amplia posible.
Una salida natural
Para estos cometidos, los fondos cuentan con la bolsa como un instrumento ideal para la creación de valor. Y mucho más en un escenario de mercados al alza, en el que las expectativas de beneficios ocupan el lugar que habitualmente corresponde a fundamentales y multiplicadores.
“Es una salida natural para este tipo de operaciones, y más si se trata de un negocio tan particular como éste, sin comparables; no hay otra empresa como LaLiga, no existen socios industriales, al menos en España”, apunta un gestor de fondos de inversión.
Nuevos socios
“Un buen número de salidas a bolsa tienen su origen en la operación de venta de un inversor que, en su día, entró en la compañía y ha logrado maximizar su apuesta”.
Por ahora, si los planes salen según lo previsto, CVC sólo controlará un 10% de la nueva sociedad. Pero este escenario puede ser a corto plazo. “A poco que la alianza sea fructífera y dé sus frutos, comenzarán a plantearse movimientos como ampliaciones de capital y entrada de nuevos socios que aporten liquidez”.
Objetivo: alcanzar a la Premier
La intención de LaLiga es aproximarse al referente de la industria no sólo en Europa, sino en todo el mundo: la Premier League inglesa. Un objetivo que se traza con un horizonte de seis o siete años vista. Un plazo que se adapta a la perfección a las escalas temporales que suelen manejar inversores como CVC.
No obstante, no es probable que los ingleses se queden de brazos cruzados para ver cómo la competencia les sobrepasa. De modo que el fútbol seguirá necesitando dinero para financiarse y los mercados suponen la oportunidad ideal. La Liga italiana también pretendía alcanzar a la Premier League en el medio plazo cuando intentó algo parecido a lo de LaLiga con el mismo partner, el que parece ahora haber aprendido la lección.