¿Por qué el AMB 'esconde' el veto por escrito a Uber?

Así lo explican fuentes de la oposición metropolitana. Ven al Gobierno cuatripartito de BComú-Entesa, PSC, ERC y JxCat preso de sus propias promesas. Recuerdan que Uber vuelve el martes a Barcelona. Para ello, se pega al decreto autonómico de radioemisoras, el 314/2016. El texto regula la intermediación de taxis, no el servicio de taxi en sí. La operadora intermediará, realizando el servicio a precio de taxímetro, primero, y con la tarifa 3 regulada, después. 

Solo falta un fleco

Guste más o menos, la vuelta de Uber a Barcelona estaría sellada, al menos desde el punto de vista legal. La plataforma solo tiene pendiente validar su software para la tarifa 3, pero el resto de pasos ya los ha cumplido. Ha notificado previamente su inicio de actividad --lo hizo el 24 de noviembre de 2020-- y asegura que cuenta con una flota de 350 taxistas que trabajarán con ellos. 

El decreto autonómico está en vigor, por bien que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) lo impugnara ante la Audiencia Nacional en 2017. "No hay sentencia de la Audiencia", señaló ayer a Crónica Global un portavoz de la CNMC. La norma rige, confirmó también ayer el Departamento de Territorio catalán, y Uber la cumple. Solo falta su registro. Quizá por ello, el AMB moduló ayer a media tarde su negativa a la compañía de San Francisco (EEUU) al indicar  que "está en proceso de validar su programario". 

Abogados: "Uber ha jugado bien sus cartas"

En el embrollo de la vuelta de Uber a Barcelona, que generó ayer anuncios de movilizaciones por parte de Élite Taxi y Stac, los sindicatos que son mayoritarios en el sector, los abogados ven solo textos legales. Y lo que analizan, encaja. Rosa Guirado, asesora estratégica de plataformas, recuerda que la intermediación en el transporte en taxi "es el único pilar del autotaxi en el que hay competencia". Los otros dos, la mano alzada y las paradas, no. 

Un coche de Uber / EP

"Uber parece obrar de forma correcta. Ha notificado el anuncio de actividad, que es lo que la norma le obliga a hacer. Es exactamente lo que haría cualquier otra radioemisora, también las de los taxis convencionales", defiende Guirado. ¿Pero y las tarifas? ¿No supondrán un problema? "Recuerden a FreeNow, la aplicación de taxis. Cobraba su propia tarifa y ponía de su bolsillo la diferencia con la oficial. Uber hará lo mismo. Será otra app más del taxi que se rige por la normativa autonómica de radioemisoras. Si esa norma está en vigor, podrá operar", sentencia la letrada. 

Taxistas: "Lo bloquearemos todo"

Lo podrá hacer siempre que el belicoso colectivo del taxi se lo permita. Élite Taxi y Stac, mayoritarios, anunciaron ayer movilizaciones si retoma su servicio en la ciudad. "Si Uber entra de forma legal, nosotros lo pararemos todo", avanzó Alberto Tito Álvarez, portavoz del primer sindicato. Desde Élite cuestionan que 350 taxistas hayan sido reclutados por la compañía y la acusan de "mentir y engañar a la opinión pública" con los precios del servicio. 

Desde Stac, su coordinador, Antoni Servós, explicó a este medio que "si Uber reanuda su servicio en Barcelona se sopesarán todas las opciones viables, también las movilizaciones". El conductor y activista confía en el veto del AMB a la tecnológica, que fue comunicado al colectivo durante una reunión de la Taula Tècnica del Taxi (TTT) que se celebró ayer por la mañana. "Nos han dicho que no están registrados como operador y confiamos en que sea sí", concluyó. 

Damià Calvet, salvado

A preguntas de este medio, el departamento de Territorio, competente en transporte terrestre, indicó que "Uber vuelve a Barcelona con taxis, sin vehículos de alquiler con conductor (VTC). En este sentido, actúan con arreglo al decreto 314/2016 en el que se regula la intermediación en el sector del taxi". ¿Qué hará la Generalitat de Cataluña? "No tenemos nada que decir, es un tema del Institut Metropolità del Taxi (Imet), son ellos quien debe determinar los requisitos y funcionamiento en línea con el reglamento citado", agregó la misma interlocutora. 

En otras palabras, Damià Calvet (JxCat), el conseller que hace dos años echó a Uber y de forma temporal a Cabify de Barcelona, sale en esta ocasión airoso del previsible conflicto que se está larvando en el sector del taxi. Si en 2019 hubo protestas ante su despacho, esta vez los taxistas se dirigirán, salvo sorpresa, al AMB, la institución que regula la industria. Por eso es nuclear el veto del AMB a Uber, y por ello sorprende que lo verbalizara a los taxistas en reunión cerrada, pero no lo pusiera por escrito. Se jugaría una querella criminal.