Una veintena de restaurantes de Barcelona se reinventan para repartir a domicilio

Una veintena de los principales establecimientos gastronómicos de Barcelona han creado GourMeet, un directorio para entrega de sus especialidades a domicilio, como respuesta a la la crisis del sector a raíz del impacto del coronavirus.

"La restauración ha pasado momentos duros, está descubriendo nuevos caminos y adaptándose a una normalidad cambiante, como todos, y quizás uno de esos caminos sea la entrega a domicilio --delivery-- y GourMeet es una estrategia para afrontarlo de forma común, como colectivo", han señalado los portavoces, Nacho Núñez, copropietario de Santa Gula y Gula Bar, y Raquel Blasco, chef copropietaria de Casa Xica.

Portal de recomendación

El directorio funciona como portal de recomendación y también como guía para un perfil de cliente que busca propuestas de alta calidad. El colectivo está integrado en la actualidad por 24 restaurantes gastronómicos referentes en Barcelona: Agreste, Al Marge, Bar Alegría, Bar del Pla, Bar Omar, Betlem, Bicnic, Casa Xica, Denassus, Ekubo, Garage Bar, Hawker 45, La Gormanda, La Mundana, Maitea Taberna, Mano Rota, Monocrom, Pla B, Plata Bistró, Racó d'en Cesc, Santa Gula, Suculent, Taverna Oníric y Un'altra Storia.

En una primera fase de lanzamiento, cada restaurante tiene su propio perfil donde publicita su carta pensada especialmente para la entrega a domicilio (indicando el coste de envío y las zonas donde se realiza), recibe sus pedidos y los gestiona, encargándose de la entrega. En un futuro próximo, todos los restaurantes tendrán un sistema compartido, que está ahora en fase de desarrollo, para asegurar que la experiencia del usuario sea idéntica y contarán con una empresa de mensajería que garantizará los estándares de calidad establecidos en un protocolo común.

Participación del comensal

El manifiesto de GourMeet compromete a todos los restaurantes a que cualquier plato debe llegar al domicilio como si se sirviera directamente de la cocina del restaurante, al tiempo que requerirá de la participación del comensal en su casa, quien siguiendo unas fáciles instrucciones, finalizará y emplatará.

"La calidad de la materia prima es irrenunciable, es responsabilidad del colectivo mantenerla porque cada plato enviado a domicilio habla de su profesionalidad; aunque la calidad tiene un precio, el colectivo es consciente de que los precios deben ajustarse al servicio, por ello sus cartas ofertarán platos con precios ajustados y con el producto que mejor viaje a las casas de los clientes", ha señalado Núñez.