Jordi Gallés, presidente de Europastry, en una conferencia empresarial a principios de año / EFE

Jordi Gallés, presidente de Europastry, en una conferencia empresarial a principios de año / EFE

Business

MCH se relame con los 200M€ de Europastry, el imperio panadero de los Gallés

La gestora presiona para vender su 20,73% del líder en producción de pan y bollería industrial, bien en una salida a Bolsa o a través de una colocación directa, como acaba de hacer en Talgo

27 marzo, 2019 00:00

Como viene ocurriendo desde hace más de una década, cuando Europastry ya estuvo a punto de salir a Bolsa, el grupo panadero catalán de los hermanos Gallés, convertido en líder en España de la producción de masas congeladas y cuarto en el mundo, ha apretado el acelerador para, esta vez sí, iniciar su andadura en el parqué.

No tanto por su propio interés, que también --aunque hayan declinado hacer comentario alguno al respecto al ser cuestionados por esta opción--, como el de su socio, la gestora MCH, que lleva dos años como loca por desprenderse del 20,73% del capital.

Después de las elecciones

“Se pretendía que fuera ya este mismo mes de abril, pero al final se retrasará hasta después de las elecciones”, cuentan a Crónica Global fuentes financieras próximas a la operación, con lo que el lanzamiento de la oferta se está ultimando para realizarse entre mayo y junio.

El nuevo retraso servirá para tener sobre la mesa los resultados obtenidos por Europastry en 2018, y ver si, como se prevé, el volumen de negocio supera con creces los 600 millones y el ebitda rebasa los 100.

Ebitda, clave para fijar el precio

El dato del beneficio operativo resulta clave para determinar el precio de mercado de una empresa no cotizada. Y, en ese sentido, los 100 millones de ebitda en 2018 elevarían la valoración del grupo de los Gallés a un mínimo de 1.000 millones de euros. O algo más si el interés de los inversores rebasa las expectativas.

De esta manera, la gestora de capital riesgo española MCH --segundo accionista de Europastry, con el 20,73% del capital-- vería cumplido uno de los objetivos que lleva esperando desde hace un par de años, el de cerrar una desinversión de lo más lucrativa.

MCH llegaba un año después de fallecer el patriarca

Llegaba MCH a Europastry en 2011, un año después de que falleciera el patriarca Pere Gallés, y saldría, ocho años después, con los bolsillos llenos.

Dando por bueno ese precio de 1.000 millones como valor de la empresa, la gestora dirigida por José María Muñoz y Jaime Hernández Soto se embolsaría unos 200 millones de euros.

Venta entre el 25% y el 50%

La salida a Bolsa supondría que MCH se desprendiera de la práctica totalidad de su 20,73% --puede quedarse con algún paquete residual de acciones-- y de al menos un 5% por parte de la familia Gallés, para cumplir con la obligación legal de que los accionistas ofrezcan al mercado como mínimo el 25% del capital de la empresa.

En el caso de los fundadores del imperio panadero, la idea barajada es mantener el control mayoritario del grupo, con una participación superior al 50%. A partir de aquí, y al margen de desprenderse del 5% legal, los Gallés, en función del precio que se fije, podrían vender un 20% adicional, con lo que recibirían unos 250 millones de euros.

MCH guarda el as de vender directamente en el mercado

La opción de la salida a Bolsa es la prioritaria para MCH, pero caso de que finalmente circunstancias sobrevenidas por las grandes incertidumbres existentes, tanto internas como externas, pudieran aplazar de nuevo la OPV, anda sondeando en el mercado la posibilidad de que algún inversor institucional pudiera comprar su participación.

Las razones con las que justifica la gestora su salida de Europastry son las mismas de las que echaba mano a principios de marzo para vender, por 69 millones de euros, el 9% que le quedaba en el fabricante de trenes Talgo.

Limitaciones de plazo en la inversión

Ambas son dos empresas bien gestionadas con perspectivas de crecimiento futuro, pero MCH llevaba demasiado tiempo en su capital. Mucho más de esos cinco o seis años proyectados inicialmente.

“Los inversores financieros tenemos a veces limitaciones de plazo que nos condicionan los horizontes de salida de las empresas”, reconocía José María Muñoz, fundador y socio director de MCH, al vender la participación en Talgo.

Sobre el momento de la desinversión en Europastry, ya hace cuatro años Hernández Soto, el otro socio fundador de la gestora, dejaba caer que el objetivo pasaba por abordar una salida a Bolsa en el momento en que la compañía alcanzase un nivel de ebitda de entre 90 y 100 millones de euros. Al cierre de 2017 ese beneficio operativo se situaba en 95 millones.