Dia se hunde en el fango a la espera de la ‘OPA chollo’ del ruso Fridman

¿Hasta dónde dejará caer el empresario ruso Mikhail Fridman las acciones de Dia antes de presentar la OPA por el 100% del grupo de supermercados?

Es la gran incógnita que se cierne sobre una cadena en la que su presidenta no ejecutiva, Ana Maria Llopis, lleva meses esperando que se haga efectivo su relevo y el consejero delegado, Ricardo Currás, ve cómo los hombres de Fridman --Karl-Heinz Holland y Stephan DuCharme-- ya parten literalmente el bacalao en la gestión, y su gran preocupación pasa por llegar al cierre de 2018 con los números propicios que le permitan cobrar totalmente la retribución variable del periodo 2016-18.

Inicio de semana con las alarmas encendidas

Mientras tanto, este lunes volvieron a encenderse todas las alarmas en el cuartel general de Dia, en la sede madrileña de Las Rozas. La semana bursátil se iniciaba con otra caída en picado.

Otro retroceso superior al 4% que hacía presagiar que el umbral de los 2 euros sería franqueado en busca de nuevos mínimos históricos. Al final, mínimas compras evitaron el golpe de efecto negativo que, por otro lado, los analistas dan por descontado. Compras que este lunes dejaban las acciones de Dia en 2,117 euros, tras subir el 0,76%.

Nueva rebaja de la cotización, antesala de los resultados

No obstante, esa caída por debajo de los 2 euros se producirá más pronto que tarde. Incluso podría producirse este jueves, mientras Currás, presenta los resultados de Dia al cierre del primer semestre de 2018, con los analistas que siguen al grupo descontando la cruda realidad de un cóctel explosivo. Caída de ventas cercana al 10%, del ebitda por encima de 20%, e incremento de la deuda, que ya crecía en casi 300 millones en los tres primeros meses de 2018, y que ha superado los 1.200 millones.

Para recibir el presumible nuevo descalabro contable, llegaba otra recomendación negativa de los analistas. En esta ocasión, la del banco británico HSBC, que ya deja muy atrás esos 2 euros de valoración, y sitúa el precio objetivo de las acciones de Dia en 1,8 euros, que colocaría su capitalización en tan solo 1.120 millones de euros.

Avances del nuevo plan estratégico

Con los resultados negativos descontados, lo que esperan este jueves los inversores es que Currás avance algún dato sobre el nuevo plan estratégico que Dia tiene previsto presentar a principios de otoño.

Novedades que bien podrían relacionarse con los primeros resultados que están ofreciendo los más de 30 nuevos Dia&Go, las nuevas tiendas de conveniencia del grupo, o también avanzar la desinversión en activos no estratégicos.

Max Descuento se pone guapa para previsible venta

En este sentido, la recién remodelada cadena Max Descuento --la línea de negocio cash&carry, especializada en servir a profesionales de la hostelería y pequeño comercio-- sería una de las elegidas. Su venta podría reportar a las arcas de Dia unos 40 millones de euros. Esta filial cuenta en España con unos 250 empleados que prestan su servicio en 35 espacios, con 35.000 metros cuadrados de superficie de venta.

Y mientras Holland y DuCharme --los hombres de Fridman en el consejo de Dia— siguen pergeñando, en colaboración con el equipo dirigido por Ricardo Currás, las líneas maestras del nuevo plan estratégico, el inversor ruso, junto a su socio Goldman Sachs, echa cuentas sobre el momento más adecuado para lanzar la oferta por el 100% del grupo de supermercados.

Los cálculos de la 'OPA chollo'

Todo está más que medido para que la OPA chollo salga lo más barata posible. Y todavía es pronto. Hasta el próximo 28 de julio no se cumple un año desde que Fridman, a través de la sociedad luxemburguesa Letterone, entró en el capital de Dia.

En este caso, los plazos resultan claves para que la operación se abarate. Como no se ha cumplido un año de aquella primera compra de Letterone, en el caso de que se lanzara esta semana la OPA, Fridman tendría que pagar las acciones restantes por el 70% de Dia a un precio de 6 euros. O sea, más de 2.600 millones de euros.

Rebajar los actuales 2.600 millones a 870

Descartada esta opción por razones evidentes, la siguiente fecha a tener en cuenta se produciría en enero de 2019, doce meses después de que Letterone comunicara a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la segunda operación de compra. La que acreditaba que ya contaba con el 15% de los derechos de votos y que adquiría el compromiso de ejercer una opción de compra por otro 10% antes del próximo 2 de noviembre.

Si Fridman decidiera dar el paso de lanzar una OPA antes de enero de 2019, la adquisición de ese 70% tampoco le saldría muy asequible. Serían unos 2.100 millones de euros los que debería pagar a los accionistas tenedores de esos 435 millones de acciones que le faltarían, con un precio de la acción en torno a los 5 euros.

Enero 2019, fecha probable de la OPA

Así pues, con estas cuentas, tanto Fridman como su socio financiero, Goldman Sachs, estarían barajando que la toma de control de Dia se produjera en ese mismo mes de enero. En ese caso, el precio a pagar sería el de la cotización media ponderada del último semestre. O sea, desde la que se está dando en estos días, en el entorno actual de los 2 euros.

Por eso resulta clave para el inversor ruso que Dia se mantenga en los próximos seis meses en esa media de los 2 euros o incluso baje más. A este precio, ese 70% tan solo le costaría a Fridman poco más de 870 millones de euros. Si esa media ponderada sube a 3 euros, la operación se elevaría a más de 1.300 millones.