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Más de 30.000 personas se manifiestan hoy pidiendo mejoras en el sistema educativo, según datos de los sindicatos, mientras que la Guardia Urbana los cifra en 3.500. Yolanda Segura, portavoz del sindicato USTEC-STEs, asegura que: "Hoy es un punto de inflexión, damos un ultimátum. Si no nos sentamos a negociar para mejorar las condiciones laborales, seguiremos movilizándonos".

La marcha, convocada por CCOO, UGT, USTEC-STEs(IAC), JUNTS-SDRC I CGT del Comitè Intercentres (CI), ha reunido a docentes, personal laboral, estudiantes y familias que se han concentrado en la pl. Urquinaona de Barcelona bajo consignas como "Más dinero público para la escuela pública" y "Menos discursos y más recursos".

A la marcha se adscriben hasta 19 entidades, entre las que se encuentra Sindicat de llogaters, Affac, Docents per l'habitatge, DocentsCat, Pindoc, Plataforma per l'Educació Musical, Plataforma 0-3, Docents en vaga, así como la Federació d'Associacions Veïnals de Barcelona, entre otros.

Pancarta en la manifestación de Educación del 15N Aida Torrubia Crónica Global

"Estamos ahogados"

Entre los asistentes se comparten quejas de una situación que se siente "insostenible" para aquellos que trabajan en el sector. Profesores de diversas escuelas comparten experiencias durante la marcha y el consenso entre los docentes está claro, no pueden hacer frente a la situación con los recursos actuales, tanto materiales como personales.

Uno de los grandes pilares en las demandas de los sindicatos es la reducción de las ratios. Es una queja que se comparte en todos los niveles de la educación. Bressol BCN Lluita reclama más personal, una de sus integrantes asegura: "Tenemos una de las ratios más elevadas de Europa y la situación en las aulas imposibilita nuestro trabajo. Es muy difícil aplicar pedagogía y es inviable atender a todos los niños".

Pancartas en la manifestación de Educación del 15N Aida Torrubia Crónica Global

"Escuela inclusiva, pero con recursos"

"Cada vez hay más niños con necesidades, pero los recursos son los mismos. No podemos hacer de escuela inclusiva con las condiciones actuales. Necesitamos refuerzo" reclama una profesora de una escuela de Canet de Mar. Sus reivindicaciones las comparten otros profesores que aseguran que la falta de refuerzo limita su capacidad de ejercer su profesión y muchos sienten que acaban siendo monitores de sus alumnos.

"La precariedad no se limita al sueldo sino a las condiciones en las que trabajamos" asegura un maestro de una escuela del Carmel en Barcelona. La burocracia y el currículum actual tampoco se adaptan a la situación que viven los maestros. Muchos piden que se haga un replanteamiento de la educación en Cataluña considerando la realidad en las aulas. Por esta razón reivindican una línea educativa que cuente con la perspectiva del profesorado.

Subida salarial

El secretario de Acción Sindical de Profesores de Secundaria, Ramiro Gil, afirma: "En los últimos 15 años no ha habido ningún aumento salarial". Cataluña se mantiene como una de las comunidades autónomas con los sueldos más bajos en educación, solo por delante de Asturias y Aragón. Gil continúa exponiendo: "Teniendo en cuenta el aumento en el coste de vida en Cataluña, los sueldos de los docentes no dan para vivir".

Ramiro Gil concluye diciendo: "No pedimos cobrar más, sino recuperar lo que hemos perdido". Marc Martorell, portavoz de Intersindical, en la misma línea explica: "La educación en Cataluña no llega al 4% del PIB, cuando según la Ley de Educación catalana se debería invertir como mínimo el 6% del PIB. Consideramos que la infrafinanciación es vender el futuro de Cataluña".

Pancarta en la manifestación de Educación del 15N Aida Torrubia Crónica Global

"No hay avances tangibles"

La lectura del manifiesto conjunto resaltó que, después de meses de reuniones, "las negociaciones no responden a las necesidades reales de los trabajadores, y no se están concretando avances tangibles que permitan mejorar las condiciones laborales y económicas".

Los objetivos que se marcan las organizaciones están enfocados a "dignificar" el sistema educativo y alcanzar "calidad" en todas las etapas educativas. Una tarea para la que no hay más esperas, tras 16 años en los que la Ley de Educación de Cataluña (LEC) no ha tenido un desarrollo real que permita alcanzar el 6% del PIB en los presupuestos autonómicos.

Los puntos a tratar serían el incremento de la plantilla estable, eliminar la sobrecarga y establecer una ratio adecuada, al igual que asegurar la salud laboral de los trabajadores, reconocer la profesionalidad con unas retribuciones "a la altura" y garantizar en materia de jornadas dignas, movilidad y bolsa de trabajo.

"Precariedad"

Por ello, emplazan al Departament de Esther Niubó a conseguir tales propósitos o, por lo menos, marcar un calendario comprometido y exhaustivo antes de la finalización del curso 2025/2026. "No podemos continuar en esta situación de precariedad", expusieron en la lectura.

Ante esta llamada a la acción, la Conselleria comunicó ayer que "tendía la mano" a las causas del profesorado, tanto a la salarial como a las demás cuestiones que plantean, por lo que en los próximos días les haría llegar una serie de fechas para discutirlas "de forma específica".

Huelgas y asociaciones

La protesta se suma a uno de los inicios más candentes en el sector educativo, a pesar de que haya un aumento en la adjudicación de plazas de Formación Profesional o se haya adelantado las adjudicaciones, pese a la crisis sobrevenida. Ya el 8 de septiembre se convocó la primera huelga del personal laboral de Educación para renovar el convenio colectivo que lleva estancado 20 años.

También, otras asociaciones se acercaron a la sede de Via Augusta en busca de acuerdos que mejoren las condiciones de su colectivo, ya sea la Plataforma 0-3 años, la Associació Catalana de Llars d'Infants o el personal del Institut Escola Artistic Oriol Martorell.

Los estudios del sindicato Ustec-STEc (IAC), mayoritario en el sector, apuntan que un 36% del profesorado quiere abandonar su puesto, mientras que el 45% manifestaba estragos en su salud mental y un 46% realizaba horas extras. Además, solo el 12% está satisfecho con el salario que recibe y un 84% detestaba la burocracia a la que se ven sometidos.

Las ratios, la falta de tiempo para preparar las clases, la ausencia de recursos suficientes en las escuelas inclusivas... Un rosario de la aurora que, a pesar de la inversión de la Conselleria, parece que aún no ha comenzado a solventarse.

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