El camionero que halló a la víctima de la violación de Igualada asegura que estaba "medio muerta"
Los transportistas que cubrieron con sus chaquetas a la adolescente han explicado que estaba ensangrentada y muy malherida
17 junio, 2024 13:15Noticias relacionadas
El camionero que halló de manera fortuita a la menor de edad que fue víctima de una brutal violación durante la madrugada del 1 de noviembre de 2021 en Igualada ha explicado este lunes, durante la primera sesión del juicio que se celebra en la Sección 10 de la Audiencia de Barcelona, que atisbó un bulto mientras conducía su camión entre una nave del polígono de Les Comes y una planta de reciclaje. La escasa luz del amanecer no le permitió reconocer qué era aquella figura que había tendida entre la explanada de hormigón que los camiones utilizan para maniobrar con más facilidad y un descampado. Para salir de dudas, se apeó del vehículo y se acercó.
Fue entonces cuando descubrió que era una adolescente. La menor estaba semidesnuda y muy malherida. “Estaba temblando”, ha recordado. La víctima, que estaba consciente pese a las graves heridas, se encontraba entre las calles de los Països Catalans e Italia del citado polígono. Aunque se trata de una zona transitada por los trabajadores de las naves, esa fría madrugada de noviembre estaba desierta porque era festivo.
"Esta chica está medio muerta"
Sin dudarlo, el hombre se sacó la chaqueta de su uniforme de trabajo y la cubrió con ella. También llamó a emergencias e intentó tranquilizar a la joven. Después, vio a lo lejos otra nave abierta y a un empleado que estaba repostando un camión y corrió a avisarlo y a pedirle si tenía algo más grueso para taparla, como una manta.
Este segundo transportista, que también ha declarado en calidad de testigo, ha explicado que cuando llegó al lugar se encontró a la chica completamente ensangrentada. "Hay que llamar a los Mossos d'Esquadra y a una ambulancia porque esta chica está medio muerta", dijo. A los pocos minutos, que a ambos se le hicieron eternos, llegaron efectivos de la policía catalana y sanitarios del SEM que le practicaron una primera asistencia en el propio polígono.
La joven no recuerda los hechos
La joven fue asaltada mientras cubría un trayecto a pie entre la discoteca Epic de Igualada y la estación de tren, a la que se dirigía para regresar a casa de su madre. La amiga con la que salió aquella noche ha explicado que quedaron sobre las once de la noche del día anterior y se dirigieron juntas a la sala de fiesta.
Había mucha gente, pues era la noche de Halloween y la sala estaba muy concurrida. Una vez dentro, tras hacer casi dos horas de cola, se enfadaron porque la víctima “se perdió” y salió de la discoteca con un chico que le gustaba, que también ha declarado este lunes. Cuando se terminó la fiesta la amiga la esperó en el guardarropa, pero al ver que no regresaba y que no respondía a sus mensajes, salió a la calle para llamarla.
La adolescente contestó a esta primera llamada y le comunicó que estaba de camino a la estación de tren. “La llamé al llegar a la estación de ferrocarril, pero ya no contestó”, ha recordado su amiga. Desde el tren volvió a probar suerte. “Le pedí el teléfono a unos chicos que acababa de conocer en el tren para llamarla, pero nada”, ha añadido, creyendo quizás que la víctima no le contestaba por el pequeño enfado que habían tenido dentro de la discoteca.
La víctima sufre amnesia
La siguiente vez que vio a su amiga fue en el hospital en el que estuvo ingresada durante casi un año a causa de las graves lesiones que le provocó su agresor por todo el cuerpo. En aquella visita la víctima, que no recordaba nada y que inicialmente creyó que la habían hospitalizado por haber bebido, le pidió que la ayudase a recordar aquella noche. Hoy sigue sin recordar parte de lo ocurrido, aunque sufre secuelas físicas y psicológicas severas.
Tras seis meses de ardua investigación policial, la Unidad Central de Agresiones Sexuales (UCAS) de los Mossos d'Esquadra dio con el presunto autor de estos hechos: Brian Raimundo C. M., un joven que ya había sido condenado cuando tenía 15 años por intentar violar a su propia hermana, de 7, durante unas vacaciones familiares en un cámping. Fue su propia madre la que puso estos hechos en conocimiento de la policía.
Se enfrenta a 45 años de cárcel
Ahora, el acusado, que en la actualidad tiene 24 años, se enfrenta a 45 años de prisión -15 por un delito de agresión sexual y 30 por un asesinato en grado de tentativa, pues las lesiones que le causó a la víctima eran "mortales de necesidad"-, así como a 10 años más de libertad vigilada y a indemnizar a la joven con 260.000 euros.