Cultivos de alcachofas en el Baix Llobregat
Mercabarna compensa con alcachofas de Alicante y Murcia la caída de producción en Cataluña por la sequía
- Los payeses del Baix Llobregat, uno de los principales productores en Cataluña, producen un 50% menos por la falta de recursos hídricos
- Esta verdura que tanta agua consume se ha encarecido en más de medio euro el kilo, en gran parte por los sobrecostes del campo
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El cultivo de alcachofas es un ejemplo de los estragos que provoca la sequía en Cataluña. Los payeses del Baix Llobregat, al sur de Barcelona, hacen malabarismos para salir adelante sin los recursos hídricos necesarios para mantener el nivel de producción de una fruta que absorve mucha agua; de hecho, el volumen de producto que consiguen colocar en el mercado ha caído a la mitad.
Los campos de El Prat y Viladecans son los principales proveedores de Mercabarna, el principal centro de venta al por mayor de la comunidad, que ha reforzado el producto nacional para seguir abasteciendo a los ciudadanos catalanes.
Sobre todo de Murcia y Alicante
A falta de alcachofas catalanas, los agricultores de Alicante y Murcia salvan el consumo en Cataluña. Mercabarna vendió 2.250.000 toneladas de alcachofas la temporada pasada (de noviembre de 2022 a mayo de 2023), y la mitad de ellas eran locales.
El punto de venta central de frutas de Mercabarna en una imagen de archivo / EP
Así las cosas, el acusado descenso de la producción al sur de Barcelona provoca ahora que la mayor parte de alcachofas provenga de otros lugares, entre los que destacan, sobretodo, el alicantino y el murciano, cuyas variedades son más grandes que la del Baix Llobregat.
Las alcachofas, más caras
En el actual contexto de falta de agua y caída de la producción, esta verdura no es ajena a la inflación. El kilo de alcachofas se vende más de medio euro más caro en Mercabarna que hace un año: 2,07 frente a los 2,64 euros actuales.
Un agricultor ante los tractores parados en Mercabarna, con motivo de la huelga del sector, a 13 de febrero del 2024
Como la oferta se ha logrado mantener compensando con producto español, los técnicos lo achacan sobre todo a los sobrecostes a los que deben hacer frente los agricultores. Los de Viladecans hablan de una inflación del 100% en los recursos que necesitan, con unos precios que amenazan la viabilidad de sus explotaciones: "Antes, con tres hectáreas podías ganarte la vida y ahora, necesitas 40".
Los agricultores del Llobregat han reducido el número de cosechas
"El agua del Llobregat no baja y toda la zona del canal se resiente", describe Carles Faura, presidente de la Cooperativa de Agricultores de Viladecans, que insiste en la profunda gravedad del asunto. De hecho, las semanas que corren son cruciales para tratar de reducir el golpe: "Los meses de febrero y marzo son cuando las alcachofas necesitan más agua, y si antes aprovechábamos hasta 10 unidades de una sola planta, ahora solo recogemos tres".
Una explotación agrícola aprovecha al máximo el agua
Las lluvias de los últimos meses "tan solo han lavado las hojas" de las 150 hectáreas de campo ubicadas en Viladecans. La falta de agua tan recurrente ha obligado a reducir las cosechas de tres a tan solo dos, y sobrellevan la falta de lluvias y las restricciones al agua (del 80%) con el sistema del gota a gota, y abasteciéndose de pozos propios y agua regenerada.
Y como no pueden mirar el cielo porque no trae buenas noticias, miran hacia abajo, temiendo que los pozos, mermados, se sequen y se infiltre agua del mar, momento en el que "los estragos serán mayúsculos".
